Corrí con suerte - Relatos Eróticos

Corrí con suerte

... inmediatamente siento que su corazón palpita de una manera rápida, yo empiezo a sudar y mi respiración empieza a ser más rápida, el comienza a acariciar mis nalgas y en ese momento abro los ojos y veo a Ricardo mirando de una manera morbosa mis nalgas, me las masajea de una manera magistral que yo boto un gemido. 

Nuestras miradas se cruzan y el sonriendo me dice que quiere mi culo para el, yo le digo que esa sería mi primera vez, a lo cual el me pellizcaas duro mis nalgas, y me da también mi primer beso, yo torpemente reaccionaba al va y ven de su lengua, el al sentir mi inexperiencia,  me da un fuerte abrazo en el cual sentía la palpitación de nuestros corazones sincronizadas. El sudor también se apodera de nosotros y veo a ese hombre más sexi que nunca. 

El baja mi calzoncillo y empieza a meterme un dedo con delicadeza mientras besa todo mi cuerpo, llega a mi abdomen y siento un cosquilleo que me exita más, el lo comprende y se centra en esa zona, luego mete otro dedo y empieza a dilatar mi ano, el cual quería ser penetrado por el falo de Ricardo, que mide aproximadamente 18 cm de cabeza gruesa y cuerpo fino. El juega con mi ano u su boca durante un tiempo, el sabe que lleva bien la situación.

Cuando llega el momento, el pone mis piernas sobre su torso sudado y me dice "no sabes desde hace cuánto estaba esperando este momento", y coloca ...

... la cabeza de ese pene en la entrada de mi ano y la va metiendo despacio, yo me quejó de dolor, entonces el empieza a besar mi cuello y espera un instante mientras mi ano se va adaptando a su carne.

Luego al meterla todo, siento sus piernas velludas en mis nalgas lampiñas y eso me exita más, me transformó en otro, agarro con mis manos sus nalgas y las empieza a empujar hacía mí, le comienzo a decir que me dé duro, incluso cambiamos de posición yo me coloco encima de él y lo comienzo a cabalgar,  el sudor baja por montones su olor a hombre me y el contacto con su vello corporal me hacen sentir único en esa noche.

Así duramos alrededor de 10 minutos, hasta sentir que sus embestidas eran más fuertes y finaliza con una descarga de su semen en mi ano, siento la contracción de los músculos de su abdomen y al instante con su carne aún dentro de mí, yo también llegó al orgasmo, siento un hormigueo generalizado en todo mi cuerpo y caigo rendido en sus pectorales, nos damos un beso nuevamente y terminamos duchandonos, en ese momento veo semen y sangre qué salen de mi ano, me preocupo, pero el me tranquiliza, me dice que eso es normal por ser mi primera vez. 

Y esa es la historia de mi primera vez, nunca la olvidaré, porqué Ricardo nunca me trató mal, el me llevó al orgasmo junto a el, y sobre todo, porqué nunca creí que ese día iba a suceder esto.