El hombre del paradero - Relatos Eróticos

El hombre del paradero

... me cortaron la luz hoy en la tarde, te molesta.

Yo: no….

Entramos y nos sentamos en una silla junto a la mesa. Llevo dos cervezas y empezamos a conversar. Bueno, en realidad él empezó a conversar y yo solo asentía. 

El: oye y tú no tienes novia?
Yo: no, no tengo.

El: pero, si tienes tan bonita figura
Yo: no, no tengo.
El: pero, si tienes tan bonita figura.
Yo: no creo que sea así pero bueno.
El dos. A ver ponte de pie para mirarte
(Todo esto con la luz que llegaba de afuera)
El: se ve que tienen las piernas bonitas. Las tienes peluditas? Puedo verlas? A ver levanta un poquito el pantalón.

A esta altura mi respiración está comenzando a agitarse por la tensión sexual que comenzaba a sentir. Me levanté un poco el pantalón y el acerco.

El: puedo tocarlas?
Yo: si….

El: Viste, tienes buenas piernas. También tienes buena altura. A ver levántate un poco la polera.

Me dejé llevar por el momento y fue haciendo todo lo que él me decía, era imposible que él no te hace mi nerviosismo o mi calentura. Cuando me levanté la polera puso una de sus manos en mi espalda y la otra en mi abdomen mientras decía “tienes bonito físico”.

El: y cómo estás de culo? Puedo tocar un poquito?.

Yo: bueno….

El: oh, que rico tu culo (mientras me apretaba con fuerza). Y cómo andas mi paquete? Puedo ver? A ver bájate un poquito el pantalón.

Lo hice. Ahi el ya estaba sentado y yo estaba de pie. En la oscuyidad Sentía sus manos recorrerme el cuerpo. Yo respiraba con ...

... agitación y Sentía placentero cada uno de sus toques. Suavemente comenzó a bajar mi ropa interior dejando mi erección a la vista. Me acarició la Bolas un poco, masajeó mi pene y Con suavidad se lo introdujo en la boca. Yo me sentía especial


con suavidad se lo introdujo en la boca. Yo me sentía extasiado. Lo dejé mamarme durante largo rato sin que ninguno dijese nada. Luego me dijo “quiero que sepas que mi intención de invitarte a venir no era para esto”, acto seguido, volvió a meter mi mete en su boca, mientras me miraba y apretaba mi culo. Luego volvió a sacarlo y dijo “pasemos para acá”, llevándome a su cama. Seguia la lluvia afuera y nosotros ahi a oscuras.

El: te gustaría mamar mi verga?.

Yo:….

No respondí. Lo vi desabrocharse el pantalón mientras yo estaba sentado en la cama y sacar un enorme miembro, el que, haciéndome que no quería, terminé por tragarme completamente. El estaba muy caliente. Nos besamos desnudos por largo rato cuando sentí que comenzaba a buscar mi culo con sus dedos. No se sentía agradable, pero cedí para no parar el extasis del momento. Para que detuviese su juego con los dedos bajé otra vez a mamar su verga. Era gruesa Y con el glande completamente a la vista. De textura suave y con muchas venas. La mamé hasta dejarla Muy lubricada y me subí sobre el. a esa edad todavía no sabía muy bien lo que hacía, Por lo que con cuidado le introduje por mi culo hasta que me acostumbre a su tamaño. El estaba entregado sin hacerMovimiento alguno. Con ...