La ardiente sobrina de mi mujer - Relatos Eróticos

La ardiente sobrina de mi mujer

Mis mejores vacaciones de semana santa me las ha dado la ardiente sobrina de mi mujer Historia 100% real. Me llamo Leonardo, tengo 34 años, casado hace 7 años con una mujer encantadora, que en estos momentos está a punto de darme mi segundo hijo. Esta historia sucedió recién, ahora semana santa. Mi mujer decidió que no íbamos a viajar en esta temporada ya que como les dije estamos a punto de tener otro bebé ella tiene 7 meses de embarazo y hay que ahorrar porque se vienen muchos gastos. Debido a eso mi cuñada nos llamó y dijo que quería venir a pasar vacaciones con nosotros, ya que vivimos en una ciudad con la playa a una hora. Así fue, llegó mi cuñada sola con su hija, el esposo no pudo viajar, la nena una niña muy linda de 13 años llamada Sahara, muy cariñosa pese a que es poco lo que hemos compartido, pues de año en año es que la familia se reúne, y así ya iba el segundo día de visita de mi cuñada en casa y decidimos salir a la playa y más porque era domingo, así que alistamos bolsos y nos fuimos, allá en la playa no pude evitar ver a Sarita. Que cuerpo tan lindo para una niña de su edad. Está bien crecidita, y empecé a preguntarme qué me pasaba, que estaba pensando al admirar a una niña y más de la familia, pero creo que la abstinencia sexual producto del embarazo de mi mujer me tenía así. El día transcurrió normal, se hizo las hora de regresar a la casa, ya eran las 7 de la noche, paramos en el camino y se bajó mi mujer y mi cuñada y quedó mi pequeño y sarita dormidos ...

... en el asiento trasero del auto, no sé qué me impulsó a mirar hacia atrás y tocar la pierna de sahara, su piel toda suave, le acarició un poco el rostro y me quedé quieto pues vi salir a mi mujer y mi cuñada, todo normal y llegamos a casa, acosté a mi pequeño y sahara por el contrario se dio un baño y bajo ya en pijama de dos piezas a cenar, el morbo me invadía al verla con el cabello suelto aún mojado y en esa pijama diminuta con sus senos algo grandes y sin brasier, tenía que tratar de disimular pero mi pene no entraba en razón y la erección estaba creciendo dentro de mi pantalón, así que me fui al baño y tuve que hacerme la paja para bajar el asunto. Volví y ya estaban en la salada las tres viendo televisión, me senté en el sofá al lado de mi mujer y al paso de una hora el sueño tenía a todos vencidos, todos a dormir hasta el día siguiente en la mañana que veo que mi mujer y su hermana se alistaban para salir pero el niño aun dormía y Sahara también, sólo dijeron que iban a mercar y aprovechar para comprar cosas para el bebé, que ya habían dejado desayuno listo en el microondas y que por favor se los calentara. Ya hacía alrededor de media hora que habían salido mi mujer y mi cuñada cuando sara se levanta y llega a la sala donde estaba viendo televisión yo y me dio un beso de buenos días, preguntó por su mamá y le dije que estábamos solos que había salido con su tía a mercar y que tardaban, que si quería desayunar me avisara y que se fuera a duchar, sólo me respondió que ...