MI APRENDIZAJE (Cuarta parte) - Relatos Eróticos

MI APRENDIZAJE (Cuarta parte)

... separamos rapidamente. Me acomodé la ropa, y dejamos que los sonidos de las voces pasaron. Nadie bajó al baño. El niño, medio asustado, subió rapidamente para unirse a sus compañeros.

Cuando me senté junto a Carlos, él me preguntó :
- "Entonces ?... tocaste su colita ?... Está estrecho ?..."
- "No... ni siquiera la ví... Muy poco experimentado el niño !... Tiene todavía que progresar mucho !... La putita me la ha chupado, pero no tuve tiempo de venirme..."
Salimos del restaurante. Carlos de muy buen humor declaró :
- "Tenemos toda la tarde por delante !... Me gustaría hacerte descubrir un lugar que a mi me gusta mucho... Es una sala de videos... Hay varias en Lima, muchas son horribles : mal mantenidas, apestan, y casi todos los chicos dentro son pirañitas o fletes!... Te prometen un montón de cosas, se hacen pagar por adelantado y luego pretenden no tener tiempo, dejandote con tus ganas !..."
- "Y por qué vas, entonces ?"
- " Porque hay otros chibolos súper sexy, chicos bien dotados y muchos con culitos divinos que incluso, sin dinero, se dejan tirar... Ojalá pudiera hoy conseguir a uno!... Te voy a llevar a una sala muy limpia, con un montón de chibolos jóvenes, veras : hay verdaderas maravillas !... El lugar, es cierto, te va a gustar... Pero como está bastante lejos tenemos que coger transporte."

Entrando en el edificio, nos encontramos, en la planta baja, en una sala de estar, que permite el acceso a la sala de videos. Proyectaban una película gay, con ...

... actores asiáticos muy cerdos. La sala estaba bastante llena, con gente de todas las edades, pero, lo que era obvio, era la asistencia de una mayoría de chibolitos bebes acompañados por viejitos... Queriendo mostrarme todo el edificio, Carlos me llevó a un pasillo con vistas, a un lado, al "cuarto oscuro", y, por el otro, a una habitación larga con varias cabinas. Frente a cada cabina, un chibolo, de pie, montando guardia, como si fuera el dueño del lugar. Mi compañero parecía haber notado alguien a su gusto : un chico con pelo descolorido, pero nada afeminado, por el contrario, con aire de matón. Tenía un cuerpo soberbio, moldeado por su ropa desgarrada artisticamente... Carlos me susurró al oído :
- "Con un culito así de rico te deja sin leche en cinco minutos, el cabrón !..."

Continuando la visita, abrí un poquito la cortina del cuarto oscuro. No se veía mucho, pero se escuchaban gemidos muy evocadores. Tuve la impresión de atisbar en la oscuridad un tío, inclinado hacia adelante, con un pene en el culo, y chupando al mismo tiempo dos pingas delante de él. Qué espectáculo !  Carlos me aconsejó de no entrar :
- "Cuidado, chico !... sí quieres entrar controla tus pertenencias, sobre todo si tienes efectivo !... es el lugar preferido de las pirañitas..."
Al final del pasillo, tomamos una escalera que conducía a una pequeña habitación con una mesa de centro y sillones por todas partes. Un grupo de chicos, todos hombres de 25 a 30 años, se besaban y se divertían entre sí. Carlos ...