La madre mas puta de todas - Relatos Eróticos

La madre mas puta de todas

... después me arrodille y comenze a chuparle la polla al director del colegio de mi hijo de forma frenetica hasta que se corrio en mis tetas. Precisamente gracias a mi recientemente descubierto talento en el arte de comer pollas, pude lograr otras de las peticiones de Jonas y consegui que sacara buenas notas sin mucho esfuerzo aunque eso si, tuve que comer unas cuantas pollas hasta que vaciaron sus pelotas en mi boca. La situación se desbordo cuando un dia que me encontraba con Jonas en una cafeteria y yo coqueteaba de forma descarada con el camarero no me percate de que mi hijo estaba alli mismo y encolerizado vino hacia mi. "¿A que se supone que juegas?" "Eres una guarra. No voy a consentir que sigas con esto. Estás avergonzándonos a todos. Papá, Verónica y a mí, eres una puta" Yo sonrei, mas bien me rei en la cara de mi hijo y no dije nada. El rostro de Andres estaba punto e estallar de rabia, cuando Jonas llegó, tomándome de la cintura. Nos besamos con lengua ante mi hijo. "Puta", me grito mi hijo Tanto yo como Jonas rompimos a reir "Anda idiota, vete con el cornudo de tu padre, que esta noche tengo cosas que hacer, mi coño espera ansioso la polla de Jonas." Andres levanto la mano pero antes de hacer nada, Jonas le dio una bofetada, mi hijo salio de alli como un cobarde insultandonos a ambos mientras yo reia sin parar, era una autentica puta. De allí fuimos a un motel, como de costumbre, Jonas se tumbó en la cama una vez en la habitación. Desabrochando el pantalón, saco ...

... fuera de este su pene, empuñándolo apuntando al techo. "Vamos zorra, besa el cetro de tu señor". Me tumbe junto a él sonriente, acercando mi cara a la olorosa polla. No era un miembro limpio y aseado. A Jonas le gustaba que oliese y fuese yo quien la limpiase con mi boca, y a mi me encantaba hacerlo. Era una demostración deliciosa de sumisión, Jonas retiró su mano, y la mia la reemplazó. Tirando hacia abajó, liberó el brillante capullo. Después, lami, me introdujo el miembro en la boca, degustando tal manjar que el morbo convertía en delicioso, aunque en realidad, era algo bastante insípido en cuanto a sabor propiamente dicho, salvo el residual y ligeramente irritante que dejaba en el paladar. Miraba a sus ojos mientras mamaba y adoraba, durante un rato, bese y mame con placer, hasta que mi muy amado chulo me ordenó montar sobre él y cabalgarlo. Colocándome de rodillas, una pierna a cada lado de su cuerpo, comenze a desabrochar los botones de mi vestido. Uno a uno, lentamente, mientras sostenía su mirada y sonreía lascivamente. Agarrándo aquel rabo adolescente por el cual suspiraba, apunte con él a mi vagina, dejándome caer suavemente, suspirando a medida que sentía como me iba llenando con su carnal dureza. Comenze entonces una suave cabalgada, procurando que mis melones se mecieran morbosamente con el ritmo de las embestidas de la polla de Jonas en mi coño. ¿Habeis decidido ya que hareis en las vacaciones? "Iremos al chalet de la playa finalmente" Genial. Me gusta que me ...