Pepa, su hijo y yo (II) - Relatos Eróticos

Pepa, su hijo y yo (II)

... Nosotros con las pollas fuera y tu madre ahí - Ya , pero no era el momento adecuado hay que prepararla mejor , no sé cómo lo vamos a hacer , pero lo que tengo claro es que nos la vamos a follar, ¡de eso estoy seguro! - Está bien , si estas decidido le voy a decir a mi madre que nos ayude. José le contó a su madre lo que habíamos hecho en mi casa , Pepa le dijo que éramos unos guarros , pero que nos ayudaría en lo que pudiera. Trazamos un nuevo plan con la ayuda de Pepa. Mi madre comenzó a salir de compras con Pepa. Una tarde nos fuimos de compras los cuatro, entramos en una tienda de ropa de mujer y Pepa le dijo a Rosa que se probara un vestido muy bonito que había en el escaparate. Era un vestido normal pero no era el "estilo" de mi madre y le dijo que no , que le parecía muy provocativo. Pepa insistió y finalmente mi madre se lo probó. Nos dijo que la esperaríamos fuera, asentimos con la cabeza, pero una vez que vimos el probador donde se metieron las dos , nos fuimos allí como una bala a meternos en el de al lado .Eran unos probadores abiertos por la parte de abajo .Nos agachamos , vimos que Rosa estaba de espaldas, se había quitado el chándal que llevaba puesto, mostrando sus bragas , (sólo se podía ver eso por debajo), yo me quedé perplejo no me esperaba aquello , mi madre tenía un culo de impresión, aunque aquellas bragas no le hacían ningún favor . Se puso el vestido, nosotros salimos rápido del probador y vimos cómo salía con el vestido puesto. ¡Estaba guapísima! ...

... ¡estaba buenísima!.Aquel vestido dejaba ver la figura de Rosa . Tenía un culo de fábula, una figura estilizada, lo mejor de todo eran sus tetas ¡vaya par de melones bien puestos!. Sólo con mirarla se me empalmó la polla. Nos fuimos a casa , mi madre se quedó con el vestido, por la noche me hice una paja de antología Fueron muchas las tardes que ellas dos salieron de compras como era lógico no íbamos con ellas para que mi madre no se mosqueara, Pepa nos contaba lo que compraban , era ropa cada vez más "atrevida".Una de aquellas tardes se fueron a una tienda de lencería y mi madre se compró un conjunto casi transparente, cuando lo vi en casa me tuve que hacer una paja pensando cómo estaría mi madre con aquellas prendas .Nuestra relación se fue haciendo más amigable , ya no era tan mojigata, era más abierta pero sus costumbres sobre las puertas no cambiaron. Fue cambiando sobre la manera de vestir , salía alguna noche con Pepa a bailar y yo pensaba que poco a poco estaba cambiando su manera de ver la vida , se la veía más alegre . Cada vez estaba más decidido , tenía que ver desnuda a mi madre. Llegó el verano , mi madre llevaba puesto aquel día un vestido de tirantes, estaba bellísima .Yo me encontraba en casa de José Ángel .Estábamos en el salón viendo una película de la tele , sonó el timbre Pepa abrió y era mi madre. - ¡Hola Pepa! - ¡Hola Rosa! - He venido para ver la ropa que me comentaste - Pasa vamos a mi cuarto y te lo enseño Se metieron en el cuarto de Pepa y ésta no cerró ...