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CARLOS-KARLA (EPILOGO)
Fecha: 14/02/2018, Categorías: Dominación Autor: mogwligdl, Fuente: SexoSinTabues
... empiezo a sentir su fierro dispuesto a la pelea sin dejar de atender sus bellas y hermosas piernas mientras que aprovechando mi posición paso mis cachetes delicadamente por su torso sintiendo la dureza de su varonil abdomen. Reparo en su pezones y recuerdo como él se abalanza sobre los míos haciéndome llegar al cielo cada vez que lo hace así que imitándole pero como si de un gatito se tratase primero saco tímidamente mi lengua para únicamente con la mera puntita casi casi rozar ese pequeño botón obscuro que sobresale. Lo mojo. Y después de cierto número de lengüetadas me atrevo finalmente a apresarlo delicadamente con mis labios sintiendo como cambia y sintiendo como se pone algo durito. Después de repetir la misma operación del otro lado sigo en lo mío. Sigo besando ese pecho del que salen tantas maldades como redimiéndole de sus pecados hacia mí. SI, le perdono. Le perdono con tal de que me permita sentirlo así. Sentirlo cerca de mí. Sentirlo dispuesto hacia mí. Le perdono eso y más. Le perdono todas sus vejaciones si tan solo me dedica un segundo de su vida. Le perdono si tan solo siento que le importo aunque su manera de demostrármelo sea diabólica y vandálica. Nadie jamás me había vuelto a ver. Nadie jamás me había tomado en cuenta. Nadie jamás había expresado interés en mi ser en mi cuerpo. A nadie le gusto. El gordo fofo, el gordo chichón, el gordo nalgón jamás fue objeto de deseo hasta que llego él a mi vida. Tal vez sea que no sabe decírmelo pero cuando me toca. ...
... Cuando él me toma, el me hace sentir que no hay nadie a quien pueda gustarle yo mas. De esa forma se ha ganado mi perdón y si. Se ha ganado que yo le pertenezca para siempre. Bajo, bajo del pecho acariciando, sintiendo y queriendo aprisionar y grabar ese momento para siempre en mi mente. Lego por fin al centro de su ser. Aspiro nuevamente y la delicada tela me devuelve el olor de esa ropa limpia y del aromatizante que yo mismo agrego cuando lavo su ropa. Vuelvo a aspirar pero esta vez, mi nariz se pone lista y percibo mas allá del olor superficial de limpieza, percibo SU aroma. Ese aroma que me ha embriagado. Ese aroma que al principio me disgustaba por la forma en que su dueño me había tomado y me había marcado para toda la vida. Ese aroma de hombre. Ese aroma de genitales. Ese aroma impregnado de su feromona que me hace desearlo tanto. Al mismo tiempo siento la calidez, que decir calidez, siento el fuerte calor de su miembro listo para la batalla. Siento como emana efluvios de lujuria su verga bien parada pidiéndome que le atienda. Estaba tan ensimismado en mi faena que… Repentinamente siento. Siento una mano deslizándose por la parte de atrás de mi muslo. Mejor dicho. Siento una cálida y suave mano deslizarse por la parte de atrás de mi rodilla subiendo delicadamente, acariciándome y despertándome aun mas mi sentimiento de lujuria intensa hasta llegar lo más arriba que podía pues ya no podía subir más al terminar mis muslos cosa que no le inmuto pues siguiendo la línea natural ...