Vueltas de la vida
Fecha: 13/03/2018,
Categorías:
Transexuales
No Consentido
Autor: andreanavarrete, Fuente: CuentoRelatos
... tía que vivía a 5 horas de nuestra ciudad, se dirigían a la ciudad de donde nosotros éramos originarios, donde vivíamos actualmente no teníamos familiares , habían tomado un avión y no habían tenido la oportunidad de despedirse pero ya llamarían… yo me enoje mucho no tenía acceso a mi casa solo estaba adentro de la propiedad en medio de los jardines y solo había un cuarto de almacén y cobertizo con vehículos y donde me quedaría? Que comería? Donde me dormiría? Como siempre me daban todo lo que pedía, no tenía ni dinero para comprar comida, solo estaba el portero que tenía su caseta fuera de la propiedad… esto era un completo caos, estaba cansado sucio hambreado y de pilón enojado… Busque que hacer y busque alguna ventana o alguna manera de entrar a mi propia casa y no pude, mi casa era una finca muy grande en las afueras de la ciudad, en medio de la finca estaba la casa y adentro había gym biblioteca etc. teníamos alberca y había muchas cosas bellas que ahora no me servían de nada, dentro de la propiedad también estaba las casad de la servidumbre eran dos pequeñas casas al final de la finca un poco ocultas en ellas Vivian dos chicas que venían de un pueblo cercano ellas tenían entre 24 y 26 años, a pesar de ser chicas campiranas se veían muy bien y mi madre como era una mujer de mundo muy cuidadosa y vanidosa consigo misma además de muy elitista las había elegido de buen porte y bellas dentro de lo que cabe y un bonito cuerpo, a cambio les concedía tener su propia casa ...
... completa con sala comedor dos cuartos cocina baño de tina etc. dentro de nuestra propiedad, un excelente sueldo mejor que de una oficinista y hasta vacaciones, las obligaba a tener todo siempre limpio y a la mano, a servirnos en todo a traer un uniforme adecuado, las obligaba a usar el gym y a tomar clases de Pilates y yoga junto con mi madre, dos veces a la semana que asistía un instructor a casa para que se mantuvieran en forma, además cuando nosotros no estábamos tenían permiso de usar la alberca o salir a la ciudad en sus horas libres, y ellas estaban de acuerdo, era un trato justo a pesar del trabajo que realizaban, realmente vivían como reinas. Aunque este día esas reinas no estaban ahora yo estaba peor que un mendigo… busque todas mis maneras de acceder a mi casa como yo sabía hacerlo, pero todo estaba cerrado y tuve la idea de; que si no podía entrar a mi casa tal vez podría entrar a la casa de servicio donde vivían las mucamas a comer algo, me moría de hambre y sabía que tenían su cocina y su refrigerador surtido. Por ahora era una alternativa, con el guardia no podía hacer nada, yo siempre lo había tratado mal era un tipo alto de unos 32 años siempre de lentes, el clásico que no hace lo que le corresponde y metiendo su nariz donde no debe y con los antecedentes que tenía con el yo con mis licras ciclistas rotas y medio culo de fuera, ahora no tenía cara ni si quiera de pedirle prestado algo de comer. Además no le tenía en lo absoluto confianza además su actuar para ...