Castigando a mi hermanastra 2
Fecha: 30/12/2023,
Categorías:
No Consentido
Tus Relatos
Autor: Pija gorda, Fuente: RelatosEroticos-Gratis
... meneandose un poco, acerqué mi boca y le comí los pezones, que delicía, de inmediato Ana empezó a gemir audiblemente, aproveché para meter otro dedo más, que culito tan apretado y caliente, verti mas lubricante y continúe hurgando con mis dedos. Sin que ella se lo esperara, tomé el plug, rápido saqué mis dedos de su culo y aún más rapido los remplacé con el plug, Ana comenzó a moverse para voltear a ver que puse en ella, intentó quitárselo a lo que yo le di un fuerte manazo y una nalgada, se lo encajé aún más. La cargué un poco e introduje mi polla en su conchita, sus ojitos me veían con esa muequita de dolor me decía:
-Es muy grande, me lastima, cargándola, haciéndola arriba y abajo la comencé a coger mientras le decía:
-Mira quién te tiene bien empalada, esa conchita apenas aguanta mi verga.
Asustada me pedía:
-No la metas toda hermanito, me duele, es muy grande.
Sujetandola fuerte, jalandola abajo y hacía mí, con mis caderas empujando duro, se la ensartaba entera. La amenacé acentuando cada palabra con una fuerte y profunda embestida violenta:
-Aqui el que manda soy yo y si te quiero partir en dos con mi verga, eso voy a hacer. ¡Toma verga, puta, toma, toma, toma, TOMA!
Ana comenzó a llorar entre gemidos, mojaba mucho mi polla y aún así decía que le dolía. Me levante con ella bien ensartada por mi y cargandola seguí cogiendomela en el aire, la llevé hasta su espejo de cuerpo completo y le pedí que volteara para que vira lo rico que me la cojo:
-Esto es lo que ganas ...
... por ser una putita, hermanita, mírate, con una enorme verga adentro, disfrutando, este coñito está empapado en jugos porque sabes que te encanta te coja así. -La follaba bruscamente, haciendo chocar sus nalgas en mis testículos, tan rico que ya quería vaciarle mi leche, aguanté para seguir castigándola. Se la saqué y la bajé, la puse frente al espejo, tomé sus brazos en su espalda, ordené que abriera bien las piernas sacando el culo. La penetré así, dándole fuerte, estaba aún más estrecha por tener el culo repleto del plug. Sus nalgas chocaban en mi pelvis y su carita se convertía en una zorrita viciosa. Gemía y gemía, mis embestidas duras y sin piedad no cesaban. Imagenes de cómo la vi chuparsela a ese imbécil volvieron a mí haciéndome enfurecer de nuevo. Me la cogía con rabias gritándole:
-¿Te gusta la verga, puta, te gusta cómo te coge un verdadero macho? Mirare, se nota que te encanta como te lleno de verga. -Sus gemidos sonaban tanto como el choque de sus nalgas, la solte de repente y ella calló de rodillas respirando muy agitadamente, me acomodé jalando su cabello, tomandola bien de la nuca, quedando de perfil al espejo, se la ensarté hasta la garganta y violentamente le follaba la boca. Hice una coleta con todo su cabello, que sujetaba para un buen agarre, la puta no tenía escape y por mas arcadas que daba yo no se la sacaba, le ordené voltear sus ojos al espejo para que viera como la hacía tragar, le decía:
-Mira que puta eres, zorra traga pijas, di que mi verga es ...