Negros de buen corazón y buena verga VIII
Fecha: 24/04/2024,
Categorías:
Fantasías Eróticas
Gays
Intercambios
Autor: Remaster64, Fuente: SexoSinTabues30
Ryan llegó a la base militar cuando el sol estaba en lo más alto del cielo, el ruido de los soldados ejercitandose y la maquinaria siendo transportada aturdió sus oídos, saludó a dos hombres negros uniformados que lo esperaban en la entrada.
—Debes ser el hermano del general, ven con nosotros, te llevaremos con él—habló el hombre de bigote estrechando su mano con el musculado, aceptando el gesto caminaron hacia el interior de las instalaciones.
Algunos ojos curiosos se fijaron en el porte de Ryan antes de volver a sus labores, recorriendo su vista por el edificio, el mayor pudo visualizar la eficiencia que había, cada actividad era hecha con responsabilidad y habilidad, casi como si los hombres del lugar hubieran perfeccionado su labor.
Curioso por el ambiente observó como pasaba de estar entre cuatro paredes a tener un extenso terreno con una casa de grandes ventanales, el reflejo de la luz solar hacia difícil ver desde afuera, pero en el interior Constantine pudo observar lo que hacía su hermano.
Apretó su agarre en las caderas de su niño mientras lo obligaba a tragarse toda su monumental verga, el chico movía su culo en círculos disfrutando de como ese pedazo de carne se impregnaba en su piel, la puerta fue abierta dejando pasar a Ryan con su maleta, los guardias se quedaron afuera haciendo guardia.
La decoración obstentosa fue lo primero que llamó la atención del hombre, cortinas doradas, retratos familiares y jarrones en pedestales estaban dispuestos en ...
... gran parte de los pasillos, una escalera de vidrio resistente llevaba hacia un segundo piso, pero el mayor no tuvo tiempo de seguir mirando, un carraspeó hizo que girará su cabeza hacia la izquierda.
Una sonrisa adornó su rostro al observar aquel cuerpo pequeño qué tanto extrañaba, el niño agitó su mano saludando mientras daba brinquitos encima de las caderas de alguien.
Ryan admiró la figura estoica de su hermano, sus piernas fornidas estiradas en el sillón como dos moldes de marmol indestructibles, luego seguía su pelvis llena de vellos oscuros que se hundian en la piel suave del menor, sus testículos descansaban con elegancia entre el pliegue de sus muslos y lo que debería ser su hombría había sido tragada completa por el culo del infante, sus abdominales marcados se estiraron mientras el mayor se inclinaba hacia él, sus pectorales duros e inflados se hincharon mientras dos pezones negros descansaban, sus fuertes brazos cubrían la figura del niño en su pelvis agarrando con sus grandes manos las caderas del chico.
El iris de color gris y el iris café se observaron, una intención devoradora hizo que Ryan bajara la mirada, aquel hombre que tenía sometido a su pequeño era más fuerte, su mandíbula estoica con esos labios suaves, su nariz perfilada, las cejas delineados y el cabello bien alineado era un símbolo de estatus, estaba ante un rey, uno con un ejército a sus espaldas.
Notando la debilidad del hombre, Constantine sonrió, sus labios se curvaron mientras sus ...