1. Follada otra vez (8)


    Fecha: 12/05/2024, Categorías: Transexuales Autor: Paty Zamptano, Fuente: CuentoRelatos

    Hola, amiguis, les cuento otra aventura. Había conocido a un hombre que resultó maravilloso. No era guapo, más bien, de rasgos gruesos, pero tenía una herramienta viril que era una belleza, claro eso lo supe más tarde. Nos conocimos por Face.
    
    Pasado un poco de tiempo y ya en confianza, lo invité a mí departamento. Al llegar bebimos unos tragos y pasé a vestirme como toda una zorrita, tanguita de hilo dental color negro con bordes rojos; un brassier color lila transparente de encaje, media copa y broche al frente; liguero color lila también, tiras de espagueti, sujetando medias color negro muy transparente; un minivestido color azul rey y super pegado al cuerpo, abierto de los lados y con escote trasero hasta la cadera, zapatillas color negro, de tacón de aguja, abiertos y destalonados, una peluca color rubio hasta los hombros, finalmente, me maquillé un poco, perfumando el cuello, los hombros, las piernas y las nalgas.
    
    Salí de la recámara y él, al verme abrió unos grandes y lujuriosos ojos, se levantó del sofá y me abrazó fuerte, diciendo –Ay, mamacita, te ves bien buenota y bien puta, tienes un cuerpazo de nena. Esta noche te haré muy feliz-. Yo sonreí y lo besé en la boca.
    
    Nos sentamos en el sofá, comenzó a besarme y a tocarme por todas partes. Ya entrados, le bajé el pants y la trusa, saltó su pene semierecto y yo se la pajee unos pocos minutos.
    
    Luego, acerqué mi boca y la besé con admiración y un poco de miedo, pues era enorme, seguro me iba a lastimar, ...
    ... pero… por lo pronto, se la mamé tan delicioso, besándola suavemente casi sin tocarla, lamiéndola a todo lo largo, dándole pequeños mordiscos en la cipota, pasando la lengua por toda su longitud de 30 cm., y me la metía toda en la boca y se la aguanté cuando me dio varias metidas hasta el fondo, luego, me la sacó cuando iba a venirse, pero le quedó tan parada, tan dura, escurriendo de mi saliva y su precum, era brillante y hermosa, realmente tan apetitosa, que me dieron una ganas locas de sentarme en ese árbol de carne y de que se me hundiera en la cola hasta lo más profundo, que me dejara el ano dilatado y ardiendo, pero feliz y satisfecha.
    
    Pero me dijo, mamacito, me quiero venir en tu boca, no te apures, luego te chorreo la cola. Yo feliz, la tomé con ambas manos, sin cerrarlas alrededor del tronco, se la pajee así, con las palmas, mientras le daba chupetones en la cabezota hinchada y escurriendo, luego, puse una mano en la base y cerrándola cuanto pudo la apreté un poco para mantener la sangre dentro de aquella herramienta; después, le pasé la lengua alrededor del glande, lamiendo con gran amor y lascivia, concentrándome en el orificio, repetí esta técnica, chupando y mordiendo, de repente me la hundió en la boca y explotó varios chorros de semen dentro, se los recibí y seguí chupando esa delicia de verga hasta que terminó y me comí todo su semen, dejándole el pito limpio con mí lengua.
    
    Sorprendentemente, su polla seguía tan dura como antes de venirse. Me sentí más ...
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