Una buena cogida con Don Martín - Relatos Eróticos

Una buena cogida con Don Martín

... más debía hacer algo al respecto.

- Mis nietos son una adoración, el más pequeño es un diablillo - continuo hablando el viejo

- Así? Debe ser difícil controlarlo - le dije - bueno Don Martín si me disculpa tengo que ir a ducharme ya que vengo de una tarde muy agitada - mentí

- No se preocupe señorita, vaya nomás. Yo seguiré trabajando - dijo amablemente

- Okey, si necesita algo no dude en llamar - le dije con una sonrisa

Me dirigí lo más rápido que pude a la habitación de Julia para poder arreglarme antes de que terminará de reparar la nevera. Abrí los cajones de ropa y revolotee todo buscando algo que ponerme "Oh Julia me sabrás perdonar pero llevo un tiempo sin nada de actividad física" pensé entre risitas, encontrar algo que me quedara como quería fue fácil ya que Julia era casi del mismo talle que yo. Encontré una mini falda que me llegaba a la cadera y un top blanco tan pequeño que mis tetas amenazaban con escaparse, la combinación perfecta; me puse la mini falda dando gracias por haberme traído la tanga de encaje y aunque no llevaba sujetador pues no importaba. Me solté el pelo y me arregle un poco con el maquillaje que Julia había dejado, bastante brillo labial y estaba lista, antes de salir me volví a colocar la sudadera gigante que me llegaba a la mitad del muslo y tapaba todo el outfit pero yo ya estaba planeando algo.

Volví a la cocina y para mi sorpresa Martín ya estaba arreglando su maleta de herramientas porque al parecer ya había ...

... terminado.

- Termino Don Martín?

- Si señorita, fue bastante fácil repararla - dijo mirándome de arriba a abajo aunque seguía con la sudadera mis piernas estaban expuestas

- Me alegra escuchar eso - dije con una sonrisa - se ve algo cansado

- Oh sí, creo que ya la edad no me permite hacer tanto esfuerzo - dijo mientras se rascaba el cuello

- Pero si usted esta muy joven aún - exprese tratando de subirle el ánimo y lo logré porque vi un sonrojo en sus mejillas blancas - oiga usted me aceptaría una bebida? Vamos para que se relaje

- No se si debería pero si me lo ofrece una jovencita tan linda como usted como no aceptarlo - dijo en un tono tierno no se le notaba ningún tipo de doble sentido solo era amabilidad

- Bueno entonces pase a la sala y ya le llevo su bebida - ordene mientras me disponía a buscar algo en los estantes de mi amiga

Yo sabía que Julia debía tener algunas latas de cerveza por algún lado, busque estante por estante hasta que las encontré, tres latas de cerveza justo ahí, las tomé y me dirigí al sofá junto con Don Martín. Cuando llegue me senté al lado suyo y le di una lata de cerveza.

- Uy de estas si le acepto - dijo sonriente

- Le gusta la cerveza Don Martín?

- Claro que sí señorita, en mis buenos tiempos me podía tomar barriles enteros, ya ves está panza es de puro tomar cerveza JAJAJAJA - dio una risa fuerte como si estuviera orgulloso de eso

- Jajajaja qué cosas dice Don Martín

- Si señorita ahí donde me ve en mi juventud salía ...