Mi ex vs mi novio (parte 9)
Fecha: 12/08/2024,
Categorías:
Fantasías Eróticas
Autor: julieta76, Fuente: TodoRelatos
El primero en despertar fue Sebastián, quien tardó unos momentos en reaccionar. Miró a su rival, quien aún dormía y se levantó para ir al baño.
Se sentía pegoteado y abrió la ducha. El agua caliente era un bálsamo para sus músculos adormecidos y estaba entregado al disfrute cuadno sintió la puerta del baño abrirse. Era Ariel, que venía a
usarlo también.
Allí se miraron de reojo, sin decir nada. Mi ex, desnudo bajo la ducha. Mi novio, de pie ante el inodoro liberando su vejiga.
Se saludaron con un tímido "hola", sin que ninguno de los dos atinara a decir nada. Entonces, Ariel se giró para mirarlo de frente y sus ojos se encontraron para mantener un rápido y silencioso
diálogo que fue confirmado con una sonrisa.
Mi novio se metió bajo la ducha, ante la estupefacción de mi ex.
-¿QUé hacés?
-Me voy a duchar. Es mi casa, mi ducha y mis reglas.
Sebastián se plantó, arqueándose para que su pene flácido se rozara con el de su némesis.
-¿Y cuáles son? -preguntó, relamiéndose.
-No sé. POdemos escribirlos juntos, putito. -Susurró Ariel, al tiempo que lo agarraba por las nalgas y lo apretaba contra sí.
Intercambiaron un suave beso en los labios al reanudar el roce entre sus penes.
-Puede que me guste. -Susurró mi ex.
-A lo mejor te gusta esto... -Respondió mi novio, succionándole el labio superior para prenderse en un apasionado beso que los dejó jadeando.
-No está mal. Pero puede que esto sea mejor. -Sebastián le guiñó un ojo y le devolvió el ...
... beso, para rematarlo con un suave mordisco en el labio inferior, mientras le estrujaba las nalgas y ambos
comenzaron a sentir un hormigueo que los recorría por dentro.
-Me gusta, putito. Dame tu lengua. -Susurró Ariel
MI ex no se hizo rogar y extendió su apéndice rosado para que mi novio lo succionara con fruición. Primero la puntita, para luego ir aumentando en intensidad y metiéndoselo más y más en la boca.
Ambos gemían y sentían cómo sus penes comenzaban a hincharse.
Las manos estrujaban las firmes nalgas con pelusilla, al igual que ambos disfrutaban del roce entre sus bolas.
Cuando los hambrientos labios de ambos se separaron para jadear, fue el turno de mi ex, quien tomó la iniciativa.
-Dame tu lengua, Ari.
Mi novio no esperó una segunda invitación y se la ofreció para que la succionara con fruición, estremeciéndolos, mientras se frotaban de pie bajo la ducha. Los penes comenzaron a inflamarse, a la
vez que las manos estrujaban las firmes nalgas de uno y otro.
Mi ex comenzó a chuparle la lengua arriba y abajo, como lo había hecho con el pene y ambos temblaron de placer. Ariel, sin poder resistirse más, aferró ambos penes para comenzar un desenfrenado
movimiento masturbatorio, al cual se le unió Seba, sin que ninguno de los dos interrumpiera el intercambio de felaciones linguales.
Los gemidos fueron el concierto que acompañó el canto de la ducha. Los corazones latían aceleradamente y ninguno de los dos quería parar.
Los besos fueron ...