Abusador segunda parte - Relatos Eróticos

Abusador segunda parte

Pasaron unos días hasta que David se puso en contacto conmigo, cuando ya nos quedamos a solas me preguntó si me apetecía algo parecido a lo del otro día, la verdad que había disfrutado y me seguía llamando la atención el sexo, así que le dije que estaba bien yo más pensando en el dinero que me debía y el que podía ganar.

Me propuso para cambiar ir a su casa a mí no me pareció mal, así que apunté la dirección donde tenía que ir ya el cuarto de hora me encontraba tocando el timbre de su casa, cuando entre por la puerta enseguidamente empezó a besar en la boca y yo me deje hacer mientras me dijo si me apetecía jugar el ocho cosa que me pareció higiénico.

Me propuso rasurarme mis genitales mis axilas y mi ano, ya verás te dará más gustito sin bello se siente todo mejor, así que en la ducha me dejé hacer hasta que empezó a jugar con mi pequeño agujero y me dijo que tenía que aprender a limpiarme lo bien, con el flexo de la ducha y encima de la taza del baño me enseñó como hacerme una limpieza profunda en mi intestino introduciéndome agua por el ano después de un rato mi intestino estaba completamente limpio y había aprendido otra cosa que sería importante para el resto de mi vida.

Después de aquello nos fuimos a la cama donde empezamos besándonos para luego enseñarme hacer un 69 mientras yo comiera su gran polla era hacía lo mismo con la mía pero además jugueteaba con mi ano jo untaba con una crema o aceite y poco a poco me daba más gusto cada vez que metía el dedo más ...

... adentro.

Me dijo que le gustaría meter su polla por allí, yo no sabía decir que no y pensaba en el dinero que podía ganar, así que le dije que podíamos probar me coloco de a cuatro y empezó a jugar con un par de dedos traspasando mi pequeño agujero para luego apoyando la punta de su polla sobre mi esfínter hizo presión y traspasó al umbral haciendome un daño horrible yo me quejaba pero él seguía empujando para sacar un poquito que aliviase el dolor volví a meterla otra vez y volví a sentir dolor.

Como me quejaba la sacó del todo me volvió a preguntar me dijo que me tenía que relajar si quería que me lo metiese yo me veía obligado de alguna manera dejarle a que el agujero así que volvió a la carga de la misma manera esta vez entró algo más fácil y con bastante menos dolor así que una vez que me acostumbré al tamaño empezó a entrar y salir de mí suavemente ya los diez minutos fue aumentando el ritmo.

Poco a poco aquel dolor se iba transformando en algo que no conocía no sabría decir si era placer morbo por dejar que aquel hombre disfrutase de mi cuerpo así que yo continuo de a cuatro hasta que me cambió de postura y me colocó boca arriba al borde de la cama cogió mis piernas y justo de momento que apoyó la punta de su pollón en mi ano la deslizó hasta dentro sin su asistencia sintiendo como sus pelotas golpeaba mi culo sí sí putita nena como te gusta que te fluya en el culo me voy a correr en tu boca te vas a tragar toda la leche.

David salió de mí y retirándose el ...