Mi Vecino Superdotado [17]
Fecha: 28/08/2024,
Categorías:
Infidelidad
Autor: Nokomi, Fuente: TodoRelatos
... con algo asomando por el culo de Silvana. Sonrió e intercambió una mirada de complicidad con su vecina. La muy zorra estaba usando un juguete anal, de buen tamaño, y lo tenía bien metido en el culo. Apenas sobresalía una protuberancia esférica, como una pelotita. Dalina lo empujó más adentro, con suavidad. Al mismo momento, Osvaldo estiró su mano derecha y comenzó a acariciarle la concha, pero sin abandonar los labios de Dalina.
Silvio miraba toda esta escena haciendo un esfuerzo descomunal por no explotar de rabia. Ese pelotudo del portero estaba toqueteando a dos mujeres hermosas y ellas no hacían más que coquetear con él… y lo peor de todo, es que el tipo ni siquiera se daba cuenta.
—Emm… creo que sí se notan más hinchados los labios de Dalina —comentó—. Aunque la diferencia no es muy grande. Silvana ¿usted no estará embarazada?
—No, claro que no. Yo tomo anticonceptivos. Tengo la vagina un poquito hinchada, eso no lo voy a negar; pero siempre la tuve así.
Y también la tenía mojada. Al igual que Dalina. Las dos, ante los toqueteos y lo morboso de la situación, comenzaron a lubricar un montón. Para colmo Osvaldo no solo tocaba por fuera, también metía rápidamente los dedos, un poquito, y luego los sacaba.
—Bueno, creo que ya fue suficiente —dijo Silvio, al notar esto.
—Osvaldo, podés pasar a casa —dijo Silvana—. El problema está en el baño. Dalina, ¿puedo hablar un minuto con vos? En privado.
—Sí, claro.
Silvio estuvo a punto de protestar, pero todo ...
... pasó muy rápido. La puerta se abrió, Osvaldo enfiló directamente para el fondo, Dalina y Silvana entraron y antes de que pudiera decir algo, le cerraron la puerta en la cara.
Silvana no perdió ni un segundo. En cuanto vio a Osvaldo entrando al baño, se arrodilló frente a Dalina y fue directo a chuparle la concha. Su vecina esperaba esta actitud, por lo que colaboró levantando un poco su pierna izquierda. Quedó con la espalda apoyada en la puerta y la hermosa Silvana dándole una de las mejores sesiones de sexo oral de su vida. El pelotudo de Silvio estaba muy lejos de chuparla así.
Los segundos fueron pasando y su marido comenzó a impacientarse en el pasillo.
—¿Se puede saber qué están haciendo?
—Silvana me está chupando la concha. Después se la voy a chupar yo a ella.
—Ja. Ja. Muy graciosa —respondió Silvio con sarcasmo—. Últimamente estás haciendo muchas bromas de mal gusto.
—No intento hacerme la chistosa —respondió Dalina, mientras admiraba la boca de Silvana. Ella movía la lengua con una energía única y le daba buenos chupones en el clítoris—. Es mi forma de decirte que ya estoy harta de tus escenitas de celos. ¿Acaso no puedo hablar ni un minuto con mi vecina sin que estés molestando?
Intercambiaron lugares. Silvana se quedó de pie y Dalina empezó a chuparle la concha mientras Silvio hacía un pésimo intento por pedir disculpas.
—Mmm… ¡Qué rica concha, por favor!
—No es gracioso, Dalina —dijo Silvio—. Ya basta de jueguitos. Sé que no te gustan ...