La isla de los castrados - Relatos Eróticos

La isla de los castrados

MANUEL: Hoy empieza el programa ese que ha sido tan polémico, ¿Lo vemos? – preguntó el chico de dieciocho años a sus hermanas.

ANA: ¿El de los presos que sueltan en una isla desierta para que se maten entre ellos? – dijo la menor de las hermanas, de catorce años.

DANIELA: Sí. – respondió la de dieciséis años por su hermano. – Ponlo, tengo curiosidad por ver cómo es.

MANUEL: Vale. Ya empieza. – dijo mientras sus hermanas se sentaban a su lado en el sofá.

Una presentadora guapísima y con un cuerpazo dio la bienvenida a los espectadores e informó de las condiciones del programa: le habían ofrecido a los peores criminales del país participar en un reallity show en el que serían enviados a una isla desierta para luchar hasta la muerte. Con la promesa de la libertad para el último que quede en pie y consiga llegar a la parte más alta de la isla, justo en el centro.

De entre todos los peores asesinos, solo veinte aceptaron participar. La preciosa presentadora presentó a los presos uno a uno.

ANA: ¿Todos son tíos, no hay mujeres? – preguntó la chica de catorce años cuando habían presentado a más de la mitad.

MANUEL: Una tia no tiene nada que hacer ahí. Está feo decirlo, pero es la verdad.

DANIELA: Si tú lo dices… - dijo la chica de dieciséis años sin querer iniciar una discusión con el machista de su hermano.

MANUEL: No lo digo yo, es la realidad. Una mujer ahí solo serviría para que la violasen. – insistió.

La presentadora continuaba con las ...

... presentaciones de los participantes, todos hombres de la peor calaña, de entre 25 y 40 años, en su plenitud física. Todos hombres excepto el último preso: Melany, que además de la única mujer era la más joven con tan solo 24 años.

CAPÍTULO 1

Dio comienzo el primero de los programas. El paisaje era precioso: una isla caribeña de arena blanca y aguas cristalinas. Todos los presos fueron desplegados en diferentes puntos, todos en la blanca orilla. La primera en aparecer en pantalla fue Melany, que para sorpresa de todos los espectadores estaba totalmente desnuda, sin ningún tipo de censura.

Manuel se quedó embobado mirando a la mujer: una rubia de metro setenta, medidas 90-60-90 y unos ojazos verde esmeralda. Se había cortado la melena hasta la altura de los hombros para que no puedan agarrarla. Además estaba totalmente depilada, aunque esto fue decisión del programa, que pensaba que el vello corporal no era atractivo en televisión y había sometido a los veinte presos a depilación láser en todo el cuerpo.

Los drones y múltiples cámaras grababan a la chica, que en vez de adentrarse en la densa vegetación de la isla prefirió bordearla en busca de un mejor acceso. No tardó en encontrarse con su primer oponente, que había tenido la misma idea. Era el más joven de los varones, un tipo alto y fuerte de 25 años con cara de pocos amigos.

MANUEL: Qué poco va a durar la rubia, con lo buena que está….

Sus hermanas no respondieron, concentradas en el desnudo cuerpo del hombre. El ...