SkyCream Capítulo 1: Hermanos Whitemane y Trolls - Relatos Eróticos

SkyCream Capítulo 1: Hermanos Whitemane y Trolls

Capítulo 1: Los Hermanos Whitemane y los Trolls

Vilkas y Farkas Whitemane eran dos rudos nórdicos de unos treinta años. Ambos hombres de gesto rudo, cuerpos musculosos, rostro con barba de dos días y ojos oscuros. Vilkas tenía media melena castaña y Farkas una larga cabellera igualmente castaño. Ambos hermanos iban caminando por los bosques más cercanos a la ciudad de Carrera Blanca. Su misión era encontrar algunos trolls que habían estado asaltando, aterrorizando y asesinando a los viajeros. Vilkas pensaba en lo que su padre les había dicho antes de partir, que si hacían un buen trabajo serían recompensando con mayor responsabilidad y poder dentro de La Compañía. Vilkas estaba emocionado A Farkas no le importaba la misión o si su padre quería probar su valía como líder. Su única meta era acabar pronto con los trolls y volver a casa a jugar con Rusty, el nuevo bardo de la taverna.

Escucharon un crujido. Farkas se detuvo.

-¿Qué es? - Preguntó.

-¡No sé!

-Deberíamos regresar. - Propuso Vilkas.

-¿Para que nuestro padre nos vea cobardes? - Miró a su hermano con las cejas alzadas en signo de desaprobación.

-¿Cobardes? - Abrió la boca en un fingido y caricaturesco gesto de sentirse ofendido.

Un gran troll de tres metros y medio de altura apareció de entre las ramas de un árbol. Una feroz criatura de torso musculoso, gruesas piernas, largos brazos y una enorme cabeza con ojos que brillaban con furia. Tenía un rostro feroz y cuando rugió mostró una mandíbula ...

... de amenazantes colmillos. Tenía casi todo el cuerpo cubierto de un grueso manto de pelo blanco.

Vilkas le dio un suave codazo a Farkas y le susurró en voz muy baja.

-Ahora calla, o podemos terminar convertidos en ceviche.

-Nunca antes me había fijado lo grande que es la verga de los trolls.

Murmuró Farkas, en un susurro apenas audible, y tragó saliva. Vilkas desvió en un gesto reflejo su mirada a la polla del troll, flácida, colgante, oscilando de un lado a otro, y aún así de un tamaño considerable.

-¿Por qué piensas en vergas en esta situación?

Reprochó entre dientes Vilkas a Farkas. Este sacudió la cabeza, negando.

-Hermano, solo señalaba una evidencia. Miras con deseo y hambre.

-¡¿Yo?! - Protestó Farkas.

-¡Tú!

Ambos hermanos se distrajeron y lo siguiente que vieron fue al troll frente a ellos, a muy pocos centímetros, con su enorme falo aún flácido a la altura de la cara de ambos. El olor era fuerte, como una mezcla de sudor rancio, semen reseco, pelo mojado y algo que no podían describir.

-¿Morir o luchar? - Murmuró Vilkas.

La bestia gruñó y abrió la boca, mostrando una larga lengua azulada con punta afilada. Estaba mirando directamente a ambos guerreros, decidiendo si eran una amenaza, el desayuno o juguetes para divertirse.

Vilkas con movimientos suaves dejó su espada en el suelo, se quitó los guantes y comenzó a masturbar la gran polla del troll, en una jugada arriesgada por tratar de calmar a la bestia.

-¿Qué haces? -preguntó ...