Martina -4
Fecha: 01/01/2025,
Categorías:
Transexuales
Autor: InesPerra, Fuente: TodoRelatos
... cuando la que se opera esté más o menos restablecida...conozco a personas que nos organizarían el viaje y también que nos recomendarían la mejor de las clínicas”.
No dijimos nada durante el resto del trayecto, pero yo percibía que la idea se había sembrado en nosotras.
Me gustaba que Marta me follara, con su polla o con un dildo de correas con vibración y carga de líquido que simulara el correrse...mi culo ya podía con cualquier tipo de consolador, estaba ya dilatado por la costumbre...todas las noches recibía polla, y apenas necesitaba lubricante, aunque con él, lo que me metían se deslizaba mejor...también me gustaba que en follara por la boca, que me hablara sucio y que me diese nalgadas y me escupiera cuando estábamos en postura de misionero.
Estaba claro que yo era la sumisa de la relación, aunque cuando me tocaba follarla a ella se invertían los papeles, pero yo no lo hacía de manera tan convincente, era como si la follase por obligación y condescendencia...yo sentía como disfrutaba y yo, por eso, disfrutaba con ella, hacía que me corriera...a veces me ponía una jaula para evitar la tentación de tocarme y ella sabía como tenía que tocarme la próstata pata hacerme rabiar y suplicar...era un poco cabrona, pero me gustaba que lo fuera….notaba cuando me iba a correr y paraba, la hijaputa paraba...y me ponía de los hígados…
-”¿Quieres polla, guarra?...¡Venga, pidemela!...¡Pídeme que te de polla!”…
Y yo me retorcía tratando de moverme de forma que mi próstata ...
... siguiese notando el masaje, pero ella era muy hábil...muy veterana y sabía follar a una novata viciosa como yo...el caso es que cuando le suplicaba y le lloraba...empezaba su movimiento de nuevo y me arrancaba gemidos que no no sabía que tenía…
-”Y ahora voy a hacer que te corras, cariño...pídeme que haga que te corras…”
Y yo, berreando como una perra, se lo pedía a gritos, hasta que ella “tocaba la tecla” y de mi pija salía un chorro de mi corrida...en ese momento ella apretaba un botón y una pequeña bomba del dildo, echaba un chorro de líquido caliente dentro de mi culo...como si fuese ella quien se corriera…
La combinación de las dos sensaciones era muy fuerte...por un lado la física y por otro la psicológica de notar como si se corriesen a la vez que tu…
A mi me gustaba comerle la polla y que se corriera en mi boca, y luego besarla, pero también sabía que ella quería que le dieran por el culo, me lo pedía con la mirada cuando estaba muy cachonda, entonces yo me ponía las correas y la follaba todo lo duro que podía...y sabía como hacerla correrse.
Una noche, después de follar, mientras me acariciaba, me dijo…
-”Martina, necesito un hombre, quiero follar con un hombre, con un negro con una polla de verdad, grande, y que eche semen de verdad...Me gustaría que no te enfadases conmigo si lo hago...créeme que lo necesito”
Aquello me sorprendió, lo cierto es que...como me parecía que estábamos también, marta ya tenía cubiertas sus necesidades...pero claro, yo ...