Mi primo Raúl (Capitulo 1) - Relatos Eróticos

Mi primo Raúl (Capitulo 1)

... aproxima hacia donde estoy sentado y pasa por atrás de mi agarrándome mis hombros como dándome masaje, luego unas palmaditas y arrima una silla para quedar cerca de mí y poder ver ambos el monitor, cuando se me repega puedo olerlo recién bañado y una loción que simplemente me derretía tenerlo tan cerca, me daban ganas de agarrarlo a besos.

—R–A ver primito de que se trata tu tarea

—Yo–Son varios ejercicios primo, tengo que completar estas oraciones, y también acomodar unas palabras y por ultimo hacer una composición.

El empieza a analizar todo lo que observa en la pantalla, y mientras él lo hace, yo me le quedo viendo como embobado, el de repente se da cuenta y me dice…

—R–Que paso primito? Todo bien?

—Yo–Este… si primo, discúlpame…

—R–No te preocupes primito, es que sentí tu mirada, tal vez se te hace raro verme porque no me conoces, pero para eso es la familia, no? Para conocernos más.

—Yo–Claro primo, y de hecho si quiero conocerte más…

—R–Claro que si primito, igual y salimos a la playa o al cine, como siempre he cuidado a mis hermanos, pues también te puedo cuidar a ti, quieres?

Cuando él hablaba yo me perdía en el verde de sus ojos, y en su boca, hablándome así y moviendo esos labios que quería comerme a besos, me tenía hipnotizado…Suspire diciendo:

—Yo–Nada me gustaría más primo…(Me delate un poco con mi cara y mi tono de voz)

Él me sonríe abiertamente y me agarra la pierna.

—R–Ah que primito, que cosas me dices! Mejor vamos a ...

... hacer esta tarea.

Me sentí como un tonto, porque de verdad me tenía embelesado mientras me decía todo eso, sin embargo el agarrarme la pierna me puso a mil. Hicimos el trabajo que por cierto la mayoría lo hizo el, me explico algunas dudas que tenía y finalmente terminamos. Lo mandamos y lo que atine a decir fue:

—Yo–Gracias primo no sabes cómo te lo agradezco.

Me le acerqué y sorpresivamente le di un abrazo, tenía que aprovechar, aunque él no se lo esperaba…

—R–De nada primito, ay! Que rico abrazo! Qué lindo!

—Yo–Es que en verdad me ayudaste mucho.

—R–Pues entonces me gustaría ayudarte más y más seguido para que me des estos abrazos tan ricos primito…

—Yo– Ay primo, no me lo tomes a mal, pero pues no sé de qué otra manera pagarte que me ayudes y además pues eres mi primo y eres muy bueno conmigo, y para que sepas, no necesitas hacerme un trabajo para yo abrazarte, así soy, bien abrazador jijijiji…

Todo este dialogo lo hicimos abrazados, el en su silla y yo de pie abrazándolo bien rico y oliéndole todo su aroma riquísimo y sintiendo su espalda, el me pasaba su mano por toda mi espalda de manera gentil, cálida y hasta protectora, en uno de esos movimientos sentí que su mano bajo un poco más y rozó mis nalgas, el quito la mano bruscamente y me miro a los ojos asustado.

—R–Primito, discúlpame, fue un accidente…

Yo me hice el desentendido…

— Yo–De que primo?

—R—Emm… es que me emocioné y creo que mi mano… este…. pues…la baje de más…. Emmm

Lo ...