METAMORFOSIS 203
Fecha: 03/03/2025,
Categorías:
Gays
Autor: Betelgeuse, Fuente: SexoSinTabues30
... entre su tierna piel y el duro pene miles de fuegos artificiales estallaron en la cabeza del “niño”, tuvo que concentrarse para no acabar en ese momento, Venancio al sentirlo trato de ver lo que era de tamaño, pero el “niño” se lo impidió: “Dime… ¿y qué pasó después con ese amigo?” “¿qué más hicieron?” le preguntó, Venancio respondiendo: “pues empezó a jugar y meter la cosa del hombre a la boca”, el “niño” muy excitado tragando saliva le pregunta: “¿quisieras tocar «mi cosa» y saber a qué sabe?”, Venancio un poco emocionado con risas nerviosas le contestó que “sí” así que el “niño” le contesta viéndose desnudo ante Venancio: “pues aquí la tienes, debes de hacer lo que viste”, el niño cargó a Venancio echándolo entre sus piernas, “¡anda!” “¡ven!” Venancio sorprendido y como descubriendo un mundo nuevo se quedó viendo un rato, “¡hazlo!” segundos después el “niño” sintió cómo esas pequeñas manos empezaban a explorar su virilidad, el verlo haciendo eso fue algo indescriptible, allí lo tenía al más dulce nene tocando con sus inocentes manos el sexo del “niño” de catorce años, esa emoción quedó pequeña a comparación de sentir el deslizamiento de esos labios puros hasta ese momento, sentía placer en su erecto pene, que fue compensado con un beso cariñoso y delicado, ese fue sin duda uno de los momentos sublimes de su existencia, pues allí estaba Venancio Alberto ese precioso niño de ocho años postrado en sus piernas, con sus pequeñas manos sosteniendo el muy erecto pene del “niño”, ...
... sus ojos atentos en cada centímetro de piel que se erguía enfrente de Venancio y con sus labios degustando su nuevo amigo íntimamente, tras unos minutos en que Venancio hacía esto, levantó su carita y con gesto de ingenuidad le pregunto qué más debía hacer, pues con los nervios se había olvidado de pensar, casi balbuceando de placer le informó de lo que debía hacer:-“¿te acuerdas de los chupetes que degustabas con tu hermana y con tus amiguitos?” Venancio respondió: “Si me acuerdo, eran sabor de fresa que dejaba la lengua rosada” le respondió con extrañeza, “pues ahora debes de imaginar que lo que tienes entre las manos es uno de esos” Venancio apreció que lo que tenía en sus manos estaba caliente y más duro, inocentemente le dijo como guardando las apariencias diciendo “no creo que lo pueda morder” esto también le dijo bromeando mientras hacía el ademán de morderlo, Venancio actuaba así aun sabiendo que ya tenía experiencia con Luciano en la casa de arriendo, el inquieto “niño” al ver la inocencia de Venancio en morder el glande le dijo asustado: “noo espera! así no…” se lo dijo casi levantando el tono de voz Venancio respondió: “ya lo sé, solo estaba bromeando” le respondió mientras se empezaba a tragar la virilidad el niño, Venancio no respondió nada, estaba extasiado de ver como introducía el pene en su pequeña boquita, “¿así está bien?” le preguntó como si estuviese rindiendo una evaluación en el colegio, “Biiiieeen, biieen, lo estás haciendo bien, pero debes de chuparla ...