1. La madre de mi amigo


    Fecha: 22/03/2025, Categorías: Incesto Autor: tangram22, Fuente: RelatosEróticos

    ... agua la presión mojó todo su pecho trasparentando el algodón y mostrando las tetas de forma mas sensual que si estuvieran desnudas del todo.
    
    Mis ojos casi salían de sus órbitas al apreciar la forma, tamaño y consistencia que habían adquirido con el paso de los años. Aunque los había visto en bikini y con algún buen escote aquello me impresionó. Dejó que los viera así húmedos y sensuales luciendo su voluptuoso cuerpo.
    
    Sin pudor alguno se sacó la prenda y la usó para secarse un poco. Sin ocultarse a mis ojos que devoraban ese cuerpo con deseo. Nada mas que el triángulo del tanga tapaba el depilado monte de Venus.
    
    - ¿Es la primera vez que las ves? ¿Verdad?.
    
    - Si, son maravillosas.
    
    Estábamos muy cerca y el silencio entre los dos rezumaba deseo. Apoyó la mano en mi pecho acariciando suavemente mi piel sudada. Incluso acarició mi pezón. Se acercó más a mí y me limité a apoyar la cabeza en su hombro dejando que mi barbilla sin afeitar rascara su cuello.
    
    - Bésame.
    
    Deposité algunos besos en su hombro y cuello. Los pezones duros acariciaban mi pecho desnudo. Por fin apoyé las manos en su cadera, acariciando suavemente su piel con ternura.
    
    - Estaremos más cómodos en la cama.
    
    Mis labios buscando los suyos y mi polla dura apretada contra su vientre plano. Me apoderé de sus nalgas amasándolas con firmeza. La cogí entre mis brazos. Ella me agarró la mano y me llevó a su propia habitación sobre sus sábanas. Todavía conservaban el calor, el olor de su cuerpo y la ...
    ... humedad y el aroma de su sudor. Puede que de sus jugos si de verdad se enteró de lo que su hijo y yo habíamos estado haciendo al llegar.
    
    Todavía nos reíamos cuando nos dejamos caer sobre el colchón y se tumbó sobre mí entre mis muslos abiertos. Besándonos de forma salvaje, su lengua entrando en mi boca y jugando con la mía mientras conseguía acariciar sus pechos con las manos y retorcía sus pezones entre mis dedos.
    
    Fui bajando para besarlos y lamerlos a la vez que comencé a sacarle el tanga que en realidad se limitó a desintegrarse al primer tirón. Bajé lamiendo su vientre y metí la lengua en su ombligo. Levanté un poco mas sus muslos con las manos y clavé mi lengua en los labios vaginales separándolos con ella en busca del sensible clítoris.
    
    En ese rato Javi se había despertado y me había echado de menos. Como su madre y yo no nos habíamos molestado en cerrar la puerta no tardó en localizarnos por el sonido de nuestros gemidos. Apareció en el dintel con ojos de sueño y nada más que un reducido slip cubriendo su fibrado cuerpo.
    
    Como más de una vez le había comentado medio en broma medio en serio mi gusto por las maduritas sexys y mi deseo por su madre. No pareció sorprenderse mucho cuando me vio comiéndole el conejo, al contrario, la escena parecía excitarlo.
    
    Le guiñé un ojo con complicidad, tampoco era la primera vez que nos veíamos desnudos en plena faena con otra persona o solos. Vernos y algo más.
    
    Estaba excitado y solo pudo llevar la mano a su bóxer y ...
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