1. Soy masoquista…


    Fecha: 07/04/2025, Categorías: Dominación / BDSM, Fetichismo Gays Autor: Martehijodejupiter, Fuente: SexoSinTabues30

    Soy masoquista…
    
    Perversión sexual de quien goza con verse maltratado o humillado por otra persona. Hace algún mucho tiempo atrás, cuando era bien jovencito, al igual que la mayoría de mis amigos, disfrutaba el masturbarme viendo una que otra revista porno. Pero, aunque eso me gustaba, y mucho, cuando alguien en casa me descubría, ya fuera alguno de mis padres o de mis hermanos, o hermanas, y en ocasiones hasta la vieja sirvienta. Lo disfrutaba muchísimo más, al ser regañado, y en ocasiones hasta castigado físicamente, por masturbarme. Pero cuando comencé a hacerme la paja fuera de casa, en los escondites en los que jugaba con mis amigos, algunos de ellos, al descubrirme haciéndome una sabrosa puñeta, en consecuencia, se burlaban de mí. Pero la cosa más rara del mundo es que sentía un mayor placer, igual o superior, al ser descubierto. No fue hasta que todos fuimos creciendo un poco más que, en cierta ocasión, pasando el fin de semana, tres de mis amigos y yo, solos en la casa de campo de los padres de uno de ellos. Como ni televisión había en ese lugar, esa noche estuvimos bebiendo de todo un poco, mezclando en ocasiones ginebra y cerveza, ron con huisqui, o tequila. A pesar de lo borracho que me encontraba, noté en la mirada de mis tres amigos, su intención de aprovecharse de mí, además me di cuenta de que entre los tres se intercambiaron secretos. Lo que al principio me asustó un poco, pero al mismo tiempo, algo que no me lo podía explicar a mí mismo, me emocionaba y ...
    ... excitaba bastante. Los tres se habían puesto de acuerdo, sujetándome a la mala, y prácticamente arrancándome toda la ropa, hasta dejarme completamente desnudo, lo que sin demostrárselos me excitó bastante. Los tres me amenazaron en ese mismo momento, con llevarme en la camioneta a la fuerza, y dejarme abandonado tal y como me encontraba, en el barrio más malo de un cercano pueblo. Sumisamente acepté hacer todo lo que ellos me ordenasen, en medio de mi borrachera, me obligaron no tan solo a que me comportase o actuase como si fuera una mujer, sino que la gracia para ellos era que lo hiciera como si yo fuera una esclava. Esa noche entre los tres se cansaron de romperme el culo las veces que quisieron, y no conforme con ello, me obligaron a mamar sus vergas y tragarme todo su semen, hasta que ya ninguno de los tres pudo soltar una sola gota más de leche. Hasta esa noche, nunca me había sucedido algo semejante, y desde luego tampoco me habían dado por el culo, y mucho menos puesto a mamar. Pero como dice un viejo dicho, la ocasión la pintan calva, creo que eso significa, que cuando algo se te presenta, te debes aprovechar. Y eso hicieron ellos tres, por lo que después que les dije que sí, sin consideración alguna, me obligaron a que continuase bebiendo, lo que hizo que yo agarrase una borrachera tremenda. Una vez así todo desnudo como me tenían, fue que comenzaron a jugar y divertirse a costa de mi persona. Al principio el que era hijo de los dueños de la casa, sacó de quien sabe ...
«1234»