METAMORFOSIS 206
Fecha: 01/05/2025,
Categorías:
Gays
Autor: Betelgeuse, Fuente: SexoSinTabues30
... testículos, alzaba su cintura para que el pequeño luego hiciese deslizarse por el tronco del pene hasta llegar a la punta del glande, allí, daba de movimientos circulares de la punta de lengua, sonreía socarronamente el pequeño Saúl correspondiendo a la risa que Eliazar Emigdio emitía con los ojos cerrados muy concentrado en sentir ese deslizamiento de lengua en su pene, las manitos de Saúl apoyadas en la pelvis de su iniciador comenzaron a moverse por sobre la piel, “sigue” “sigue” “lo estás haciendo bien” “mejor que antes” “sí… mi pequeño” “lo haces mejor que antes”, esos deditos alargados de niño rico deslizaban sobre el tronco del pene contribuyendo a expandir lo húmedo de aquella piel peluda como se lo había enseñado Eliazar Emigdio, luego, Saúl se apartó a órdenes de su iniciador diciéndole que se desvista, los deditos alargados desabotonaban la camisa poniéndola encima de la ropa de Eliazar Emigdio cuidando evitar manchas, de igual manera lo hizo con las sandalias al suelo y los calcetines puestos sobre ellas, se podía ver esos dedos alargados y esas piernas blancas rellenitas de músculos producto de las clases físicas de aquella academia europea donde estudiaba, se quitó la sobre camisa quedándose únicamente en calzoncillo, Eliazar Emigdio vio ese movimiento del niño, aún el muchacho estaba acostado en el catre improvisado sin dejar de sonreír, se levantó de donde estaba acostado caminando descalzo por ese suelo terroso, hasta llegar a una silla donde se sentó y ...
... haciéndole gestos al niño él se sentó sobre Eliazar Emigdio, las piernitas del pequeño descansaban sobre los muslos de Eliazar Emigdio, debajo de su pene lampiño sobresalía el pene erecto aún ensalivado de Eliazar Emigdio que se agitaba, Saúl miraba la mano de Eliazar Emigdio que tomaba esos dos penes de tamaños diferentes que estaban erectos, miraba atento a esos movimientos del pene junto a su penecito, al oído llegaba la voz sensual de Eliazar Emigdio que le decía “¡míralos!” “cómo juegan” “mira al mío” “¡míralo!”, “¿lo quieres adentro?” al escuchar esa frase el niño quedó asombrado, recordaba las veces últimas en las que lo habían hecho, negarse ahora no significaba nada, se limitó a ponerse cabizbajo con una mirada de resignación pestañeando copiosamente por parte de Saúl, esa actitud del niño la entendió bien Eliazar Emigdio, por eso de pronto instintivamente comenzó así a besarle el cuello de forma muy repetitiva tanto así que se sentía la calentura de su piel, “¿Quieres más?” el niño respondía asintiendo, mientras sentía los besos en cuello y hombros miraba ese pene largo y grueso cabezudo de piel morena clara sobre su penecito lampiño de piel blanca, algo gimió cuando eran besadas sus mejillas infantiles acompañadas del roce de lengua abriendo la boca y cerrando los ojos, al ver esto Eliazar Emigdio sonreía, para dentro de sí estaba consciente que ya lo tenía, y era cierto pues su cuerpo se relajaba un poco, se encorvó un poco dejándose besar repetidamente su espalda, ...