-
María y Marta (parte 4)
Fecha: 31/05/2025, Categorías: Fantasías Eróticas Autor: Jaime M1, Fuente: CuentoRelatos
... terminó de remover el pepino dentro del culo de Marta y lo sacó, a lo que se escuchó el gemido de cierto alivio de Marta. María agarró el pepino recién sacado del culo de Marta, envuelto en el condón y lo empezó a lamer por completo y lo comenzó a restregar por toda su cara como si fuera la polla de alguien. Una vez terminó de lamer los jugos del ano de Marta dejó el pepino y agarró el calabacín. Le colocó un condón por la parte más gruesa con una cara de excitación a la vez que de maldad. María pretendía meter el calabacín por el culo de Marta por el lado más grande y más ancho. Vertió un montón de lubricante por la punta del calabacín y lo colocó en el ano de Marta. Mientras tanto yo observaba toda la escena con mi polla a punto de estallar de la excitación. Con el calabacín colocado sobre el ano de Marta ya solo quedaba comenzar a introducirlo. Marta no miraba para atrás, tan solo notaba lo que tenía en sobre su culo. María comenzó a apretar la hortaliza hacia dentro del culo de Marta. Este comenzaba a dilatarse poco a poco. Marta mostró cara de asombro, notaba que lo que María la quería introducir iba a ser demasiado grande. María continuaba dilatando el culo de Marta a media que introducía el calabacín. El diámetro máximo de la parte ancha era de unos 8 centímetros. Marta cada vez abría más los ojos, notaba que lo que estaba entrando por su ano era muy grande, María apretaba más y Marta comenzaba a oponer resistencia poniendo en tensión sus piernas e incorporándose ...
... ligeramente, estaba comenzando a rechazar lo que la estaban metiendo por el ano. Al ver la reacción de Marta, María no espero más terminó con un movimiento rápido de introducir la parte ancha del calabacín por completo dentro del culo de Marta, de tal manera que su ano se cerró dejando dentro lo más gordo del calabacín. La reacción de Marta fue instantánea. Un jadeo de placer salió de su boca, un gran grito que podía confundirse con un grito de sufrimiento pero que no dejo lugar a dudas de que fue de placer, cuando por su vagina un enorme chorro de flujo vaginal salió como si de un grifo se tratase. Las piernas de Marta temblaban y se estaban mojando enteras. Un charco se hizo en el suelo y los brazos y las piernas de María quedaron salpicadas al estar arrodillada junto a ella ejecutando la acción. Marta puso sus ojos completamente en blanco mientras no dejaba de gritar con la boca abierta. Era una situación que no me esperaba para nada. Tenía mi polla a punto de estallar así que al ver a Marta teniendo ese tremendo orgasmo que parecía que iba a perder el conocimiento decidí subirme a la mesa de cristal, me puse delante de Marta, de rodillas frente a su cara y sin decir una palabra, sin que Marta con los ojos en blanco se pudiera dar cuenta y con su boca completamente abierta gritando a más no poder, le metí la polla dentro de su boca para follarme su garganta de nuevo. La boca de Marta no se cerraba. No hacía nada por mamar mi polla, solo se dejaba penetrar hasta la ...