La Agencia de Modelaje 2ª parte
Fecha: 01/06/2025,
Categorías:
Incesto
Sexo con Maduras
Voyerismo
Autor: Veronicca, Fuente: SexoSinTabues30
... la chupo a papá, y él a mí.
—Lo que me imaginaba….., pero bueno, ni se te ocurra decirle nada de lo haces aquí.
—¡Nooo!, mamá.
A la semana siguiente, nuevamente recibimos otra llamada de la Agencia, para invitarnos a una fiesta que estaban organizando, a la que iban acudir varios de sus clientes y muchas de las niñas de las que trabajan con ellos, por lo que si estábamos interesadas, querían que asistieran nuestras hijas, porque estaba muy bien pagado.
Las dos aceptamos, entusiasmando a nuestras hijas la idea de ir a esa fiesta cuando se lo dijimos, porque mi hija ya le había contado más cosas a Cris sobre lo que había hecho ella, aunque la madre puso la condición de poder estar ella también en la fiesta de alguna forma, para poder ver a su hija y sacarla de allí si veía que lo pasaba mal.
Los de la Agencia se lo pensaron y al final aceptaron, con la condición de que yo la acompañara. El trato era que nosotras íbamos a estar contratadas como camareras para serviles y así podríamos verlo todo.
Cuando llegó el día de la fiesta, ya estaba todo preparado. Dejamos a las niñas en la Agencia, con las demás que iban a asistir, y nosotras nos fuimos con el grupo que iba a trabajar de camareras en esa fiesta.
La fiesta se celebraba en una casa antigua, alejada de la ciudad, que tenía un gran Salón, con varios sofás y mesas distribuidos por todos lados, donde estaban sentados los clientes, a los que íbamos sirviendo lo que nos pedían, pudiendo ver al fondo unas ...
... puertas que daban a las habitaciones.
Al momento trajeron a las niñas, que se pusieron todas juntas en un extremo del salón para que todos las fueran viendo. Eran ocho en total y las había de varias edades, todas muy guapas y vestidas muy sexys, hasta con tacones y ligeramente maquilladas.
Los señores invitados a esa fiesta, eran todos de mediana edad, algunos más maduros, pero todos muy elegantes, notándose que eran todos de dinero, seguramente empresarios o con puestos importantes, que empezaron a llamarlas para que fueran a su lado, preguntándoles cómo se llamaban y otras cosas para conocerlas mejor y entablar confianza.
Alguno ya había puesto sus manos en las piernas de las niñas, acariciándolas mientras hablaban con ellas y el que estaba con Cris, ya había subido su mano por debajo de su vestido a la vez que le decía:
—Eres muy jovencita tú ¿Cuántos años tienes?
—Tengo 11, señor.
—¡Ah!, muy bien, eres muy guapa. Déjame que te suba el vestido para verte bien. ¡Ay!, que linda eres, te ves muy bonita con este tanga que te puso tu mamá. ¿Te gusta vestir así?
—Sí, me gusta estar guapa.
—Claro, ya vas siendo mayor y tienes que presumir. Seguro que los señores como yo te miran mucho por la calle, a que sí, nena.
—Sí que me miran. Y me dicen cosas, a veces….
—Me lo imagino…Es que estás divina, criatura, dame un besito así con la lengua. ¡Mmmm!, que rica estás —agarrando su culito mientras besaba a la niña.
Los demás tampoco perdían el tiempo y ya ...