Colegio para señoritas
Fecha: 11/06/2025,
Categorías:
Transexuales
Autor: Gabina, Fuente: TodoRelatos
... fue que tuve la mayor atracción sexual hacía una figura femenina que he podido tener, aparte de las diosas del género en internet que adoro: Agatha Lira, Blondelashes19, Mayitabellita y TsAviva.
Recuerdo nuestro primer encuentro sexual que tuvimos ella y yo, fue cuando me invitó a su casa por primera vez; la casa de su madre, para ser más clara, era un lujoso departamento en la zona centro de la ciudad, muy cerca del metro Sevilla, su mamá era una abogada que tenía un buen puesto en la suprema corte de justicia y procuraba mucho a Devany, pues es hija única. Aquel día fuimos solas ella y yo, me dijo que iba a ayudarme a salir por primera vez a plena luz del día como mujer; pero una mujer bien, linda y hermosa pero respetable. No como la puta que era por las noches en mi pueblito. Porque yo tenía escasas tres faldas, y dos juegos de pants completos de mujer, muchas blusitas bonitas y variedad de lencería, pero nada como esos clósets repletos de ropa y accesorios, zapatos y tacones de Devany.
Aquel día me invitó a ducharme con ella, y yo estaba muy temerosa pues era muy mi amiga pero estaba riquísima. Pasamos a su ducha, y se comenzó a desvestir como si nada, se quito todo menos sus panties y yo boquiabierta viendo su bella figura: un cabello largo y lacio hasta las nalgas, unos pequeños senos pero con unos pezones gigantes y rosados, un ombligo que provocaba morderlo y esa carita angelical. Me puse dura de mi pequeño pene, y comence a desvestirme, yo no tenía esos ...
... pequeños senos, estaba muy planita, pero tenía más nalga que Devany y siempre me ha gustado traer la ropa interior más linda que puedo comprar, mis cacheteros yo los amo y ese día llevaba unos de color rojo de licra y con encaje y un top que hacía juego perfecto. Ella me miró y me dijo que me iba a ver fabulosa cuando terminaramos, nos despojamos de nuestra ropa interior y entramos a la regadera. Tenía mucha curiosidad, ví si pene, uno muy pequeño que no se levantaba ni con grúa, que hasta parecía que jamás había salido de su empaque, se lo comencé a acariciar y ella sólo me sonrió; nos besamos y comenzamos a tocarnos todo nuestro cuerpo, ella me miró y me dijo que mi pene se le antojaba, lo jalo mucho bajo el agua tibia que nos mojaba todas. Mi pene me daba mucha pena, se levantó mucho, ella lo chupó un poco varias veces, quería venirme y que ella saboreara mi semen pero no pude, me hacía falta una verga en mi ano.
Terminamos de jugar lo más que pudimos y comenzamos a arrugar nuestros dedos, la señal para pasar a su dormitorio a vestirnos y divertirnos. Nos secamos muy bien, humectamos nuestros cuerpos con crema corporal de esencia a vainilla, yo humectaba su espalda y ella la mía, hasta que llegué a su trasero y me lo mostro, un agujerito rosado como sus pezones, comencé a ultrajarlo con la crema y ella me lo permitió, metía mis dedos a su interior y tenía tantas de ganar de meter cualquier cosa ahí, se veía muy muy lindo. Me dijo que tenía juguetes, saco de un cajón en su ...