¡Lluvia de vergas!
Fecha: 02/07/2025,
Categorías:
Sexo en Grupo
Autor: Charapola, Fuente: CuentoRelatos
... alguien del estudio nos estaba observando atrás de una columna, y se estaba masturbando. Él no se dio cuenta de que lo vi, pero yo me puse mucho más cachonda. Tenía mucho morbo de saber que un extraño nos veía follar a mi papá y a mí.
Después vi hacia otra dirección y otro chico también nos miraba. Poco a poco los fotógrafos del estudio se empezaron a dar cuenta de lo que pasaba pero miraban desde lejos, y mi papá estaba tan enfocado en mi culo que no se dio cuenta, pero yo sí.
Entonces mi papá me dijo que se iba a venir, y sentí la necesidad de que se viniera en mis pies. Así que le pedí que me la sacara del culo y que acabara en mis pies. Me giré otra vez frente a él, le extendí mis pies y se vino justo sobre mis dedos. Pero yo estaba demasiado caliente y no me conformé con eso. Así que volteé a ver a los que nos miraban y grité: “¡Vengan, también quiero sentir su leche! ¡Quiero que me llenen toda!”.
Mi papá se asustó, pero todos los que estaban viéndonos se acercaron corriendo sin dudarlo y se empezaron a masturbar alrededor de mí. Hicieron a mi papá a un lado y trataron de acercarse para metérmela, pero les dije que solo los iba a dejar verme y venirse encima de mí, pero ...
... nada de follarme. Me quité el vestido y lo tiré al piso. Y ahí estaba, sentada sobre una mesa fría rodeada de hombres jalándose la verga. No sé cuántos eran exactamente, pero imagino que eran cerca de 15 o 20 chicos. Los primeros empezaron a venirse en el suelo pero les dije: “¡No lo tiren! Pueden acercarse a venirse encima de mí”. Les extendí los pies y poco a poco empezaron a eyacular encima de mis pies y mis piernas. Uno de ellos se subió a la mesa, se paró sobre mi cabeza y se vino en mi cabello. Otro de ellos me pidió que extendiera la palma de mi mano, la extendí y se vino en ella.
Mi sueño por fin se había realizado, completamente cubierta de semen por todo el cuerpo. Desde los dedos de los pies hasta las rodillas, los muslos, la cadera, el abdomen, los pechos, mis hombros, el cabello y la cara; tenía esperma escurriendo por todo mi cuerpo. El último chico se vino en mi pierna izquierda, en mi muslo, y el semen se escurrió por el interior de mi pierna hasta llegar a mi vagina. Entonces mire al frente y vi a mi papá parado frente a mí con su cámara de fotos en una mano, apuntándome, y con la otra mano jalándose la verga. Todo terminó con el flash de su cámara deslumbrándome.