1. Historia del chip (038): Una nueva Kim (Kim 014)


    Fecha: 02/04/2018, Categorías: Dominación Grandes Relatos, Autor: chopin, Fuente: CuentoRelatos

    ... aparentemente. Prefería ir con su cordel taparrabos y sus pendientes rojos que rozaban su piel. Roger abrió la caja. Dentro había un consolador... Negro. No era demasiado grande, lo que tranquilizó a Kim después de la primera impresión, sabiendo para quién era. Le costaba reconocer en Roger, la extrema vulgaridad, la falta de tacto. Kim reconocía que la estaba poniendo a prueba sin lograr adivinar qué pretendía. —Póntelo. Detrás— ordenó Roger. Kim se incorporó y llevó el culo hacia atrás para colocárselo. Habían probado consoladores antes pero nunca en plena calle. A Roger no le gustaba que usase lubricante. El dolor no era excesivo pero la humillación sí. Cuando ya lo tenía dentro, Roger la atrajo y la besó. Kim reaccionó automáticamente, mojándose y endureciendo los pechos. Roger acarició los pezones antes de pellizcarlos con fuerza. Kim ya había cerrado los ojos y se había despreocupado de que alguien pudiera observarlos, tal y como tenían establecido. Por primera vez en mucho tiempo, Kim se sintió abrumada. Cualquiera que pasase la vería como una prostituta, ofreciéndose a un cliente. No parecería una relación de pareja o unos novios pasionales sino una simple transacción. Roger no dejó que Kim descansase hasta pasado un buen rato. Ésta sabía que después de tanto tiempo en ese banco bastantes personas habrían visto el sobeo. Esperó el último pellizco de despedida con cierta ansia. Roger no la decepcionó y tuvo que soportar cinco en cada pezón. Abrió los ojos. Los pezones ...
    ... estaban acostumbrados a ese trato, estando Kim tan incómoda que había vuelto a su vida anterior por un rato. Los dos se habían dado cuenta y, aun así, Kim prefirió decírselo. —Esa era la idea, amor—. Le dijo Roger. —Tengo una propuesta para ti. Puedes pensártela esta noche. —¿Desde cuándo puedo escoger? — preguntó Kim y con ganas de acariciarse un pezón mientras el culo empezaba a protestar un poco. —Tengo curiosidad por saber qué prefieres... O ser prostituta o aceptar intercambios con mis amigos. —¿Qué tipo de intercambio? — preguntó Kim. Roger volvió a coger los pezones. Kim se colocó de manera que le resultase más cómodo. El pellizco fue brusco. —Es una especie de club. Yo te presto a otros y obtengo a cambio derecho a sus parejas. —La prostitución no me atrae. Ya lo has visto— resumió Kim. —Sabía que escogerías la segunda alternativa. —Eres un idiota, Roger. ¿Tanto te costaba decírmelo? ¿Te avergonzabas? Roger volvió a pellizcarla. Kim tuvo que contenerse para no pegar un respingo. Ya había aceptado el dolor cotidianamente, ahora había crueldad en los gestos de Roger. —No me avergüenzo. Al contrario, estoy orgulloso de ti. Quería que supieras como era la antigua Kim, que pudieses recordarla. Ahora prefieres estar desnuda a llevar ropa. —¡Depende de la ropa! Menudo tramposo. ¿Puedo quitarme ya todo esto? — preguntó. —Claro que no. Yo tengo que viajar unos días. Te dejaré en casa de un amigo dentro de un rato. Él decidirá que tienes que llevar puesto. —¿Cuándo volverás? — ...
«12...4567»