En el Crucero 1 - Relatos Eróticos

En el Crucero 1

... par de semanas." Me respondió con un emoji aventando un beso, y la notificación del Uber me regresó al presente. - Ya vámonos chicos. - ambos me miraron preocupados, yo era transparente ante ellos.

-No, ahorita mismo bloqueas a Nick, no quiero que ande cambiando tu mood con cada mensaje que te llegue. Este viaje es la primera vez en años que vamos los tres solteros a algún lado. - dijo Alexis levantándose, y poniéndose mi mochila en su hombro. - Si esa es la relación final, ahí seguirá en un par de semanas. - dijo Gabo, un poco triste, pero solo intentando alivianar mi sentir. - Tienen razón, Nick también sabe que quedamos en no mandarnos mensajes durante este viaje. Ya fue la última vez que le contesto, lo prometo.

En el aeropuerto, al hacer check-in nos dijeron que nuestros lugares seguían siendo business class, Nick mantuvo nuestros asientos aún cuando ya no vino al viaje. En la sala vi a una familia, eran una pareja de adultos cerca de sus 40, con dos hijos, una chica y un chico. Se veía que era joven, pero llevaba una chamarra con el escudo de una universidad. Se escuchaba que discutían de cosas de la escuela, el chico no quería tomarse un año sabático y su papá no estaba a favor. Me reí recordando los problemas que yo tenía cuando cumplí 18 años, me reí y me puse mis audífonos para esperar a que nos llamaran. Al abordar el avión, Gabo y Alexis se sentaron juntos, y el asiento junto al mío se encontraba vacío. La familia de la discusión estaba sentada justo detrás ...

... de nosotros, y no paraban de conversar, la conversación estaba subiendo el tono, al punto de que la aeromosa tuvo que pedirles que guardaran silencio durante la demostración de seguridad. El chico tomó sus cosas, y se levantó de su lugar para sentarse a mi lado.

El chico estaba enojado, y no dijo nada al sentarse, pero esta era la primera vez que en realidad tenía oportunidad de observarlo. Era un chavo realmente lindo. Tenía una cabellera oscura, casi completamente negra, que estaba despeinada pero con intención, naturalmente se apuntaba hacia la izquierda. Su piel era blanca, casi llegando a pálida. Su nariz era respingada, y estaba cubierta de pecas, como si se hubiera asoleado el día anterior. Los labios del chico eran rosas, y estaban inflados. Lo estaba viendo de perfil, pero sus ojos eran verde oscuro, como un bosque. Mi corazón se saltó un latido, y sacudí mi cabeza para dejarlo ser.

Cuando fue hora de que nos ofrecieran una bebida, me quité mis audífonos y pedí un vodka tonic, y el misterioso chico solo pidió lo mismo que yo. La azafata le pasó una bebida a mi vecino, que a su vez me la pasó a mi. Nuestras manos se rozaron, y me di cuenta que estaba teniendo un flechazo por primera vez en mucho tiempo.

-Gracias, eh... - le dije sin saber cómo terminar la frase.

-Benji, jaja, me llamo Benji. - me dijo mostrándome una blanca sonrisa, mientras alargaba su brazo para tomar el segundo vaso.

-Mucho gusto, soy Jerry. - le respondí, sabiendo que en cualquier ...