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Intercambio de cuernos
Fecha: 17/11/2025, Categorías: Incesto Autor: lorena lorena, Fuente: CuentoRelatos
... mucho cuidado de que el semen no cayera al suelo, y le dejé bien limpia su polla, después él se fue a tirar el pañuelo de papel al W.C. Cuando volvió acercó mi mano a su polla y me dijo: –¿Cuñada corremos una segunda etapa? –Si tú quieres cuñado, por mi encantada, le dije. Y comencé a acariciarle la polla que respondió rápidamente a mis estímulos y se puso durísima, él me dijo: –La meneas muy bien Lorena, pero creo que me gustan las cosas muy especiales y ahora querría metértela por el culo. –Cariño, después del rato que me has hecho pasar no puedo negarte nada. El volvió a salir de la habitación y entró con un bote de lubricante. –No hace falta cariño, le dije, mi culo, aunque últimamente cada vez menos recibe la visita de la polla de tu hermano. –Si, pero como yo la tengo más grande no quiero hacerte daño, me dijo. La verdad yo no veo que haya gran diferencia de tamaño entre las pollas de mi suegro y las de sus dos hijos, que en ese momento eran las que conocía, pero si a él le hacía ilusión pensar que su polla era extraordinaria, ¿Para qué quitarle la ilusión? Así que siguiendo sus instrucciones me puse en el suelo, encima de una ...
... alfombra, a cuatro patas. –Me encanta la idea de hacerlo como lo hacen los perros, dijo él. Untó mi culo con su lubricante mientras me decía: –Tienes un culo fantástico Lorenita. Y después poniéndose en una postura parecida a como lo hacen los perros introdujo su polla dentro de mi culo, y comenzó a moverse no se si era el placer de la follada o la idea de estar sodomizando a la mujer de su hermano mayor, pero el caso es que el mostraba gran excitación y sus movimientos me proporcionaban un gran placer, me llevaron a tener varios orgasmos, en un momento dado llevó varios de sus dedos al interior de mi coño y comenzó a follarme con ellos, era algo divino, y encima estaba segura de que su mujer nos estaba viendo, lo único que sentía es que mi marido no lo viera también y se sintiera un cornudo. Seguimos de esta manera hasta que se corrió, mi culo quedo lleno de su leche. Él me dijo: –Cuñadita esto ha sido fantástico. Yo sentía lo mismo, pero no podíamos emplear mucho más tiempo aunque seguro que el saldo de mi suegro se ocuparía de que repitiéramos, así que me lave me vestí y me fui ser la mujer de mis cuñados parecía que iba a ser muy interesante.