La excursion naval - Relatos Eróticos

La excursion naval

... el desayuno, las 2 chicas acompañadas de los 2 árabes bajaron de nuevo por las escaleras que conducían a la planta baja y esta vez se dirigieron al otro lado del pasillo, que conducía a la parte trasera del barco. Allí les esperaba uno de los guardianes que les abrió la puerta franqueándoles el paso.

-Está bien, muchas gracias. Puede quedarse fuera, creo que estas señoritas van a estar encantadas con nosotros y no darán problemas.

De esta manera entraron los 4 en aquel gran salón. Disponía de sillas, sofás y sillones, alrededor todo de una especie de escenario elevado como medio metro del suelo. Era una sala con el techo mucho más elevado que las otras estancias que habían conocido. Aquella especie de atril estaba cubierto por encima por barras de hierro que lo cruzaban de lado a lado y de las que también colgaban focos luminosos que estaban apagados.

-Bien señoritas, queremos que se suban allá y se sientan protagonistas.

Dubitativas subieron los 2 escalones que conducían a la parte alta y allí de pie frente a ellos, esperaron acontecimientos. Ellos mientras tanto habían tomado asiento en un amplio sofá frente al escenario.

-Si les parece señoritas, vamos a jugar a un juego de preguntas.

-Bueno Omar, creo que ya tenemos suficiente confianza como para llamarlas por sus nombres, al fin y al cabo, hasta incluso las hemos medio visto las tetas, jajaja.

-Tienes razón primo- Está bien Gema y Patricia, os haremos 8 preguntas a cada una y por cada respuesta ...

... incorrecta, deberéis quitaros una prenda. Si respondéis correctamente a todas, nada pasará.

-Bien, quitaros las chanclas playeras de los pies, dado que no cuenta como prenda y ahora, enumerad que otras prendas se ponen en juego.

Las dos amigas se quitaron las chanclas de sus pies, que uno de los hombres recogió y las dejó en un lateral del escenario, inquiriéndolas para que respondieran.

-Pues una blusa y el short, dijo Gema.

-¿Solo lleváis 2 prendas puestas?

-Y la ropa interior, añadió Patricia.

-Bien, ósea que llevan blusa, short, sostén y braguita, 4 prendas ¿correcto?

-Si, confirmó Gema

-Bien chicas, pues de vosotras depende que nos mostréis o no vuestras cositas, jajaja. Vamos a comenzar.

Y tomando un mando a distancia, una pantalla de televisión bastante grande se encendió en un lateral de la sala. Allí abrieron una especie de video juego, donde incorporaron los nombres de las chicas, apareciendo en la pantalla sus nombres como si un concurso se tratase, y empezaron las preguntas.

Las primeras 2 preguntas fueron bien sencillas y tanto Gema como Patricia las superaron con éxito. Ya sólo les quedaban 6.

Gema, pregunta número 3, anunciaba la máquina. ¿Quién fue el tercer presidente de los Estados Unidos? El gesto de la chica anunciaba que no lo sabía y dijo un nombre al azar que no resultó ser el de Jefferson.

-Error, debes entregarnos una prenda Gema.

Con gesto contrariado, Gema se desabrochó los botones de la blusa blanca que llevaba y ...