Los niños también seducen - Relatos Eróticos

Los niños también seducen

Qué tal, soy nuevo en estos foros de relatos y leyendo algunos sobre incesto y de sexo papá/hijo me animé a contarles mis experiencias

Para ponerlos en contexto actualmente tengo 38 años, estoy felizmente casado (con mujer claro) y tengo dos niños

Desde joven tuve muchas relaciones, novias, amantes, sobre todo con madres solteras porque son más fáciles para un acoston, por eso en su momento me sorprendió el hecho que terminé dando de mamar al hijo de una de ellas , para ser exactos un niño de 6 años que ya estaba muy despierto en cuanto al sexo, de ahí el nombre del relato “los niños también seducen”

El nene en cuestión se llamará Angel, hijo de Eli, una amiga que conocí en un empleo y empezamos a salir, mas que nada a coger porque no era una relación seria (al menos para mi), nos íbamos a moteles y todo normal hasta que un día no tuvo con quien dejar a su hijo y me invitó a su casa, o mas bien al cuarto donde rentaba, el cual era muy pequeño, había dos camas al fondo y dividía una cortina de lo que era la sala donde estaba una tele y una mesita para comer, el baño estaba afuera

La primera visita fue mas que nada para conocer al niño, yo creo que ella pensaba que había algo serio pero en fin no le quité la ilusión con tal de seguirla cogiendo

Ahí conocí a angelito un niño delgadito medio werillo, cabello castaño, muy bajito para su edad, hasta aparentaba menos pero ya iba en primero de primaria

Todo muy bien el angelito muy juguetón, platicaba mucho, típicas ...

... preguntas de niño, en fin, normal, pero había algo que no era típico en el comportamiento de un niño

Lo primero que noté es que al abrazarme frotaba su carita en mi bragueta, de una forma que yo sentía algo erótico pero pensé que eran imaginaciones mías, eso se repitió muchas veces que hasta tenía que separarlo y me sentía incómodo de que su mamá se llegara a dar cuenta porque de verdad era estarse frotando e incluso oler la bragueta y eso me decía que no era un simple juego de niño

No le dije nada a ella, le pregunté a él porque hacía eso y se ponía serio y tímido pero igual lo siguió haciendo

Lo siguiente ya no fue solo frotar su carita sino directamente sobaba mi bragueta pero con unas ansias que me sorprendía como cambiaba su comportamiento de estar juguetón a suspirar y cerrar sus ojitos

Sinceramente no sabía qué hacer pero definitivamente no podía decirle nada a ella

Ángel por su parte sabía muy bien en qué momento acercarse, esperaba que su mamá estuviera distraía cocinando o lavando los trastes para acercarse a mí y seguir con esto de tocarme

Claro que toda esa situación me ponía muy nervioso pero no podía hacer nada y solo me quedaba estar atento a que ella no viera lo que su niño hacía y como era de esperarse, la reacción natural de mi pene era ponerse duro, lo que angelito notaba inmediatamente y mas ansioso se ponía, apretándolo por encima del pantalón, recorriendo todo a lo largo y frotando aún mas su cara

Llegamos al punto que yo le avisaba ...