Por muchos años que pasen - Relatos Eróticos

Por muchos años que pasen

... me produce recordar que un día mis labios se fusionaron con tus labios. Aún guardo el sabor de tu boca, vida mía.

No hay moraleja alguna en este episodio que acabo de plasmar, pero, sí que hay una colateralidad de la que no quisiera prescindir, y es que, sabes qué pasa, que aquello ocurrió sin que, en apariencia, nadie de los presentes, tomasen conciencia de lo que estaba pasando. A veces he pensado, es muy posible, que al igual que yo me he movido en la tesitura de si fue un sueño o fue real, aquellas personas, nuestros amigos y amigas, a buen seguro, percibieron lo que estaba ocurriendo, precisamente porque tú eras el centro de aquel universo, y debió resultarles tan irreal que yo pudiera besar tu boca que, sin premeditación alguna, entre todas y todos, zanjaron el asunto cerrándolo en un cofre bajo infinitas llaves. Mira que, en esos encuentros en los que, de tarde en tarde, tengo la dicha de volver a verte, nunca nadie ha osado mencionar aquel precioso episodio, cuando, hasta ínfimas situaciones salen siempre a colación.

Me da todo igual, solo, una vez más, desde esa posición de cobardía, que dio lugar a mi primer apodo en Cartas sin sellos, "Cobarde", vuelvo sobre ti, no junto a ti, para recordarte que, a estas alturas de mi vida, sé que te amaré hasta que me muera.