-
Mi hermano y yo le dimos por el culo a mi esposa
Fecha: 24/12/2025, Categorías: Incesto Autor: GoodBrother, Fuente: CuentoRelatos
... cuando mi hermano pegaba su pelvis con la de mi esposa llenando de leche la panochita de mi caliente Linda. Después de un momento, se retiró mi hermano de encima de Linda y me sonreía con picardía. Linda me invitó a mamarle su panochita inundada de semen y así lo hice, acomodándome en posición de sesenta y nueve, yo encima de ella. En esa posición, Juan aprovechó para acariciar mis nalgas y hacerme lo mismo que yo le había hecho, pero también sentí la mano de linda que, después de acariciar mis bolas, junto con mi hermano me acariciaba el ano, esa sensación era nueva para mí, pero siempre me había llamado la atención, ya que yo si había visto películas de muchachos haciéndolo, tanto que algunas veces yo traté de introducirme una salchicha en mi culo, logrando hacerlo solo muy poco, calentándome excesivamente ya que eyaculaba casi de inmediato. En esta ocasión, me sucedió lo mismo, por un lado, estaba saboreando la esperma y por otro sentía los dedos de ellos tratando de entrar en mi culito, desde mi posición, yo también acaricié el culito de Linda pero ya no aguanté mucho y exploté en la boca de mi esposa con un dedo de mi hermano metido en mi culo. Cuando estuvimos algo tranquilos, los comentarios no se hicieron esperar, Linda nos dijo “que calladito se lo tenían, les gusta que les acaricien las nalgas, lo pude ver todo por el espejo”. Yo solo sonreí mientras mi hermano preguntó a linda, ¿no te han cogido por el culito? Linda contestó que nunca y yo expresé ...
... que hacía un tiempo lo intentamos, pero que a Linda le dolió mucho y ya no seguimos. Juan dijo que él nos iba a enseñar a hacerlo y que nos iba a gustar mucho. Pregunté que si a él ya se lo habían cogido y me contestó “Bueno, pues hubo un año que Tomas -nuestro primo- y yo, estuvimos juntos estudiando en otra ciudad, Tomas estaba en preparatoria y yo en profesional, nos rentaron un departamentito y allí vivimos juntos. Luego él y el resto de su familia se cambió a Chihuahua. Mientras seguimos platicando y tomando algunos tragos, Juan siguió con su confesión. En ese año Tomas y yo llegamos a tener relaciones sexuales, él me cogía y yo a él también, hicimos de todo y aprendí algunas cosillas. Seguimos platicando al borde de la cama y la excitación se apoderó de nosotros nuevamente, Linda de pie y nosotros sentados, comenzamos a besar y acariciar a Linda entre los dos, con marcada inclinación hacia sus nalgas mientras Linda comentaba que le gustaría conocer al primo Tomas y preguntó, ¿Qué tal verga tiene? Juan comenzó a besar sus nalgas poniendo especial cuidado en ensalivarle su culito abriendo sus nalgas con los pulgares y le pidió que se acostara de lado doblando sus rodillas para dejar acceso libre a su ano, diciendo, “no te ilusiones, que no te vamos a compartir con Tomas, ¿verdad que no, Héctor?” yo estaba muy atento a lo que Juan quería hacerle a mi esposa y no perdía detalle, comenzó a introducir un dedo luego dos y hasta tres, mi Linda se notaba excitada pero ...