Mi Cuñada...
Fecha: 28/04/2018,
Categorías:
Primera Vez
Sexo en Grupo
Voyerismo
Autor: Etalon30, Fuente: xHamster
... su personalidad, acababa de inventar a bote pronto una mentira totalmente creíble para sacarnos del problema. Supe entonces que para seguir con nuestro erótico juego debería tener mucho más cuidado, lo que había ocurrido ese día podría despertar en mi mujer sospechas innecesarias que de repetirse constantemente acabarían por tirar el teatrito que había levantado en menos de 24 horas.La comida transcurrió sin sobresaltos. Los padres de mis mujeres estaban sorprendidos con el cambio de apariencia de su hija mayor, su mamá comentó que ya era hora de comenzar a vestir como una mujercita, Gaby mi guiñó un ojo y le dijo:- Si mamá, esto de ser una mujercita me está gustando mucho. Creo que se lo debo a mi hermana.Mi mujer sonrió satisfecha, todos parecían muy contentos con el reciente cambio de look de Gabriela.En los días posteriores tuve que salir en viaje de trabajo fuera del país, por más que intenté cancelarlo no fue posible, no quería que las cosas con Gabriela se enfriaran y que a mi regreso nuestra situación hubiera cambiado. Por la mañana, tarde y noche llamaba a mi esposa para ver como iba todo por la casa, pero durante todo el día enviaba mensajes llenos de lujuria a Gabriela.Dicen que el teléfono celular es el principal implemento con el que una esposa puede descubrir una infidelidad, pero eso no me iba a pasar a mí. Antes de salir de viaje, en el aeropuerto, compré un teléfono de prepago, extraje el chip y lo guardé en un pequeñísimo compartimiento secreto de mi ...
... cartera. Cada que enviaba un mensaje a Gabriela, extraía el chip de mi número original, que afortunadamente salía con suma facilidad, ingresaba el chip de mi “hot line” y leía y enviaba mensajes, acto seguido reintegraba el chip original y guardaba el otro en mi cartera. Era un proceso largo y tedioso, pero era la única forma de no dejar rastros de mis conversaciones con Gabriela; decidí también no usar ese número para hacer o recibir llamadas, ya que mi mujer podría tenerlo a su alcance en cualquier momento e hilar con mucha facilidad los hechos. Si Gabriela me hablaba tendría que hacerlo a mi teléfono personal, y yo podría entonces contestar con toda confianza, y si yo llamaba a mi cuñada, podría hacerlo con toda inocencia. El único riesgo era que mi mujer descubriera el chip en mi cartera, cosa poco probable porque yo mismo tardé en descubrir ese espacio varios días después de comprarla.En mi primer mensaje a Gabriela, escribí:- Hola leoncita. Soy tu amante bandido. Para seguir esta comunicación debes prometerme: no utilizar mi nombre real, no llamarme a este número y borrar este mensaje de inmediato.Unos segundos después ella respondió:- Está bien León. ¿Cuándo voy a volver a verte? Estoy ansiosa por sentirte otra vez.El teléfono celular se convirtió en un inmejorable aliado para mantener muy caliente mi relación con mi cuñada. Nuestras conversaciones por mensaje subieron de tono, al punto de que tuve que masturbarme hasta dos veces en un día pensando en ella. Pasaron los ...