Buscaba perder mi virginidad a los 15 y recibí más que eso ese mismo día.
Fecha: 29/05/2018,
Categorías:
Hetero
Autor: Sexhoy18, Fuente: SexoSinTabues
... todo en fin de semana para nosotros. El viaje de 3 horas me pareció eterno. Iba en camino a perder mi virginidad, me temblaban los pies, mi vagina se mojaba cada es que imaginaba ver desnudo ante mi a Adrián. Me desesperaba el tiempo que tardaba en llegar. Esas tres horas fueron eternas hasta que al fin estaba bajando de camión y ahí estaba Adrián. Se veía más guapo en persona pero me había mentido en algo. No tenía 21 años. Era mayor. Tenía 35. Se veía muy bien pero me dio miedo que fuera más mayor de lo que había dicho. Me abrazó tomando mi maletita y me dijo a la vez -Si, soy mayor, pero no temas mi reyna, todo estará bien, sólo dime si aceptas continuar o ahora mismo podemos comprar tu boleto de regreso sin problema. Sus palabras me dieron confianza. Y acepté irme con él. Nos fuimos en su coche directamente a su casa. En en camino me iba acariciando la cara y las piernas y no paraba de decirme que era realmente hermosa. A mi me parecía perfectamente guapo, su voz era muy varonil, estaba vestido con ropa muy cara, olía muy rico y su barba le venía muy bien. Estaba emocionada y nerviosa a la vez por lo que iba a pasar en unos momentos. En el camino había demasiado tráfico. Dijo que tomaría un atajo, así que se dirigió por calles más solas y alejadas de la cd. En el recorrido sus caricias en mis piernas iban siendo más intensas. Empezaba a acariciar mi vagina por debajo de mi falda sin perder de vista el camino y sin dejar de conducir, me hacia temblar, sentía ...
... delicioso, sus dedos hicieron a un lado mi calzón y empezaron a entrar en mi hoyito y jugar con mi clítoris haciéndome gemir de placer. Me incliné hacia atrás y serré los ojos para abandonarme a sus caricias. De pronto me dice -Quieres conocer mi pene mi reyna. Le conteste que si con la voz entrecortada por lo excitada y por la emoción. Si dejar de conducir desabrochó su cinturón y bajó con trabajo su pantalón y sus bóxers hasta los tobillos liberando su enorme pene grueso completamente erecto. Mis ojos no podían creer eso tan hermoso. Se veía mil veces mejor en vivo que por foto. Era enorme, gordo, con venas saltadas y Moreno. Me pidió que la acariciara, cosa que hice sin pensarlo. Él puso su mano sobre la mía y empezó a subir y bajar mostrándome como hacerlo, cosa que aprendí de inmediato. Me pidió que le diera un beso en la punta de esa hermosa herramienta. Me lo pensé un poco y finalmente lo hice. Mi instinto me llevó a abrir la boca después de darle un par de besos. Me metí un poco en la boca, sólo la cabeza y se la empecé a mamar. Él dio un gran gemido mientras decía - Wooow mi reyna, que rico, sigue así aaaah aaaaah si no dejes de hacer eso aaaaah. Su sabor era delicioso. Poco a poco me fui metiendo más a la boca hasta que pude mamar gran parte de su gran pene. No sabía que un pene pidiera saber tan rico, no sabía como es que supe hacer sexo oral pero lo estaba haciendo como experta y disfrutando al máximo, eso me tenía súper excitada. Su huevos eran enormes, los lamia para ...