MI EDUCACIÓN COMO SUMISA – MI PRIMERA SESIÓN - Relatos Eróticos

MI EDUCACIÓN COMO SUMISA – MI PRIMERA SESIÓN

... estaba se sacudía, parecía que tenía fiebre, pero no, no era que estaba mal, si no que estaba ansiosa, arrecha, caliente, fogosa. Me tuve que bañar hasta 4 veces ese día y eso que para aquel entonces hacia un frio tremendo en lima, pero mi cuerpo experimentaba tal calor que me tenía que bañar a cada rato para poder controlarme. Mientras transcurría el día me puse a seleccionar mi ropa, saque de mi ropero todo lo que tenía, Alejandro me pidió que vaya muy sexi, no sabía si irme con jean, mini o un conjunto completo, es más quería irme de forma casual, como hacia frio pues una chompita blanca, un jean de color negro y zapatos de tacón, algo de maquillaje y wuala, pero luego dime voy a ir al MARRIOTT de esta forma, nuuuuuu, no, no, no, a un hotel tan fino ir vestida como si fuera a ir a cualquier lugar mmm pues no. Lo pensé mejor, así que como si fuera ir a una fiesta me puse mi mejor ropa, un conjunto de color Rojo, con la falda suelta que me llegaba hasta la mitad de los muslos, en la parte de adelante apretaba un poco haciendo que mis pechos se vieran enormes y muy parados, el escote que tenía allí dejaba ver parte de mis pechos, entre el ombligo y mis pechos mi conjunto tiene una especie de faja que va con el vestido y tiene algunas perlitas de adorno. Luego de escoger muy bien la ropa decidí pintarme las uñas de color rojo sangre de toro, mi cabello iba a ir suelto, pero eso si trataría de llevarlo siempre a un costado del hombro, luego seleccione los aretes, unas grandes ...

... circulares y en al final el pinta labios uno de color rojo, pero algo ligero ya que mis labios de por sí ya son rojitos. Ahora ya estaba lista tenía que esperar y calcular mi tiempo, pues yo vivo por San Martin de Porres y llegar hasta el Marriott y con el tráfico que hay en lima pues hay que ir con tiempo de sobra para llegar a la hora acordaba. Llegue al Marriott con diez minutos de anticipación, la verdad que en esos momentos me asalto la duda y no sabía si irme y dejarlo todo allí o entrar, mi cuerpo se escarapelo, mis nervios parecían saltar, tenía miedo y a la vez tenia ansias, así que respire profundo y entre con una enorme sonrisa para disimular mi estado. En la recepción estaba una chica muy guapa, piel trigueña clara, ojos pardos, labios rojos, cabello negro ondulado, delgada, con atributos nada despreciables pues con la blusa de su uniforme que lleva pues dejaba ver que tenía pechos muy grandes. Pregunte por Alejandro y ella con una sonrisa me dijo que me estaba ya esperando, me indico la habitación e incluso ordeno a uno de los botones para que me acompañara, la verdad se portó muy amable conmigo, pero lo que más me desconcertó fue que al momento de irme, ella me sujeto la mano y con una sonrisa muy picara me dijo casi susurrando, DISFRUTA TU NOCHE QUE SEGURO JAMAS LO OLVIDARAS. Me dio una guiñada y yo fría atónica, sorprendida. Respiré profundo para calmar mis nervios y sorpresas, y fui a la habitación de Alejandro. Al llegar me despedí del botones al estar sola ...