A mano
Fecha: 07/06/2018,
Categorías:
Sexo en Grupo
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
... escuchando todo lo que me decía sin saber que decir. Solo le pedí que no gritara por que se daría cuenta Raúl. Lo único que pude alegar en mi favor fue que realmente no era nada importante para mi, que todo se debía a un simple deseo sexual. Le dije que nunca antes lo había hecho y que me perdonara. Me dijo que me pusiera en su lugar. Entonces llegó a mi mente una idea perversa. Le dije que si me perdonaría si yo le permitía hacer lo mismo. Me contestó que ella no deseaba a nadie, que como era posible que le dijera algo así. Le dije que solo quería demostrarle que no había sido más que sexo y que no me importaba si ella lo quería hacer por que yo estaba seguro de sus sentimientos. Estuvimos hablando casi hasta el amanecer. Por fin después de mucho hablar y más tranquilos, me dijo que estaba muy cansada y muy lastimada, que me saliera del cuarto y que en la mañana hablaríamos. Me salí del cuarto a tratar de dormir un poco en la sala. Al día siguiente me despertó un cerrón de puerta. Era Raúl y me dijo que por que dormía en sala. Le dije que Mónica me había pedido que me saliera, por que estaba roncando mucho. Entre al cuarto y Mónica no estaba ahí. Luego fui a la playa y ahí la encontré sola mirando el mar. Le pregunte como estaba y si había pensado las cosas. Después de un momento de silencio me dijo que estaba bien, que lo haría solo para demostrarme que me haría sentir nada bien. La besé y le dije que lo único que me interesaba era que me perdonara y le repetí que estaba ...
... seguro de sus sentimientos y que no le reprocharía nada. El día transcurrió mas o menos normal, solo que Mónica estaba un poco seria y Karla se había vuelto mas descarada en sus coqueteos. En la tarde Karla y Raúl se metieron al mar y nosotros nos quedamos platicando. Le dije que si Raúl le parecía bien para hacerlo y me contesto que no era su tipo, que mejor le diera tiempo para elegir con quien lo haría, que tal vez sería mejor esperar a llegar aGuadalajara para con tiempo decidirlo. Eso no me hizo sentir muy bien, ya que yo suponía que sería con el, pero como yo fui quien dio la idea no me quedo más que aceptarlo. En la noche nos fuimos a un bar tipo disco. Karla y Mónica iban súper despampanantes. La verdad no acostumbramos mucho ir a ese tipo de lugares, pero el ambiente estaba muy bien, había muchas mujeres buenísimas, pero la verdad las de nosotros eran de las mejores. Predominaban los jóvenes, pero también había gente de nuestra edad. Raúl y yo no bailamos mucho, pero como ahora se acostumbra que las mujeres bailen solas, las dejamos bailar, mientras nosotros platicábamos y tomábamos. Como a eso de las dos de la mañana, Karla ya estaba muy tomada y Raúl me dijo que si ya nos íbamos. Le dije que si, pero Mónica me dijo al oído que los llevara y le pidiera la camioneta, por que se quería quedar otro rato. Me dijo que ahí en la disco había mucho para escoger y que se sentía con ganas de hacerlo de una vez. me di cuenta que el alcohol la había motivado y me dio miedo lo que ...