Helena y una noche con strippers
Fecha: 16/06/2018,
Categorías:
Anal
Sexo Duro
Lesbianas
Autor: Anitaslut44, Fuente: xHamster
... vueltas. En el baño de damas había de todo, pero ninguna señal de mi amiga.Cuando emprendía el regreso, me crucé con el rubio “bombero”, que entraba al baño de caballeros. Estaba completamente desnudo, tomándose su enorme pija con una mano y llevando un pote de gel lubricante en la otra. Me miró de arriba abajo y me hizo un gesto de invitación para que entrara con él. Yo estaba un poco mareada, así que no le costó mucho convencerme. En un rincón encontré la causa de la tardanza de Helenita.Mi gran amiga estaba sin su minifalda, subida a la cintura del “leñador”, quien estaba de pie y la aferraba por sus hermosas y firmes nalgas, mientras la hacía subir y bajar sobre su enorme verga, que se veía entrar y salir de su concha. Al ver a su compañero sonrió y se quedó quieto por unos instantes. Helena estaba también bastante afectada por el alcohol, los ojos cerrados, la boca abierta con expresión de lujuria.El bombero se ubicó a espaldas de ella, lubricó la punta de su gran pija con el gel y luego metió un par de dedos en el culo de Helena, que gimió con sorpresa ante la intrusión. El rubio me miró mientras le iba metiendo muy despacio esa ahora brillante cosa dentro de la cola a mi amiga. Ella gimió un poco más, mientras le enterraban esa dura verga y entonces los tres comenzaron a balancearse en un sensual movimiento rítmico. Yo me había quedado en otro rincón, observando todo medio adormilada, demasiado cansada como para tocarme mientras veía cómo ambos sementales se cogían a ...
... mi amiga.Después de un rato de bombearla bien duro, repentinamente el chico rubio se la sacó del culo y avanzó hacia donde yo estaba. El leñador entonces llevó a Helena contra una pared, todavía entrelazada sobre su cintura y comenzó a darle bien duro, haciéndola gemir y gritar cada vez más fuerte.El bombero se me acercó mostrándome su verga todavía bien dura y me preguntó si quería ayudarlo a acabar. “Me vas a dejar así??”. Le contesté que solamente me gustaba observar como cogía mi amiga, pero el chico insistió tanto que finalmente agarré su enorme cosa con una mano y comencé a hacerle una buena paja. Cerró los ojos y se dedicó a sentir mi mano masajeando su pija. Sentí que una de sus manos subía por mi muslo por debajo de la falda hasta encontrar mi tanga. La corrió a un costado y metió muy suavemente un dedo entre mis labios mayores, que por supuesto encontró bastante humedecidos por la excitación de semejante show.Me gustaba la sensación de masturbar a un tipo y que a la vez me masturbara, pero adiviné sus intenciones. Seguramente estaba pensando que si lograba excitarme lo suficiente antes de que yo lo hiciera acabar a él, no iba a poder soportar tanta calentura y entonces terminaría pidiéndole que me cogiera. Así que apuré el trámite y en pocos instantes el pibe aulló y comenzó a soltar toda su leche caliente sobre mi mano. Sacó sus dedos de mi concha, me agradeció con un cariñoso beso en la frente y desapareció por la puerta sin decir nada más.Helena seguía gimiendo ...