DESNUDANDO MI INOCENCIA Y FRAGILIDAD - Relatos Eróticos

DESNUDANDO MI INOCENCIA Y FRAGILIDAD

... -Me gustas, me gustas mucho niña ... que pase lo que tenga que pasar. Y en eso, siento que él con sus enormes muslos comenzó a abrir mis piernas ... yo comencé a gemir de miedo MMMMMM AHHH NOOO ... y luego sentíiii ... ¡¡¡AHHHHHHHHHHHH!!! ¡¡¡AHHHYYYYY!!! ¡¡¡AAAHHUU!!! ¡¡¡MMMMMM!!! Mis débiles gemidos de niña asustada se convirtieron en alaridos de dolor, algo nuevo, imponente y enorme estaba visitando mi vagina, haciéndose respetar y ocupando espacio que no le pertenecía ... ¡¡¡AHHHHHHHHHHHH!!! ¡¡¡AHHHYYYYY!!! ¡¡¡AAAHHUU!!! ¡¡¡MMMMMM!!! ... Mi padre hacía chocar sus huevos con mis pequeñas y débiles nalgas PAAFFF!, PAAFFF!, PAAFFF!, PAAFFF!, PAAFFF! ... yo solo veía estrellas, me dolía ¡¡¡AHHHHHHHHHHHH!!! Me comenzaba a sentir distinta y poco a poco el dolor era más soportable ¡MMMMMM! ¡AHHYYY! ¡AAUUU! ... Yo pensaba qué será de mi madre frente a lo que su marido hacía, e inocentemente pensaba “va a ayudarme”, pero viendo por la puerta, veo que ella disfrutaba tanto como mi padre ... ella estaba desnuda, acariciaba su vulva con sus dedos y se pasaba la lengua por sus labios. Se estaba masturbando. A ella no le importaba mucho lo que le estaban haciendo a su hija ni las consecuencias que podían ocurrir ... siempre ha sido una mujer extremadamente liberal y abierta de mente. Mi padre cada vez me embestía con más fuerza PAAFFF!, PAAFFF!, PAAFFF!, PAAFFF!, PAAFFF! ... y yo seguía resistiendo dentro de toda mi debilidad, solo entregándome a mi suerte ¡MMMMMM! ¡AHHYYY! ¡AAUUU! ...

... ¡AHHH! ¡YAAAA! ¡AAAUU! ... hasta que llegó el momento que mi padre tanto deseaba, el final de la película que estaba viendo mi madre y el recibimiento de las visitas que esperaba mi vientre ... mi padre tomó mis piernas con sus dos enormes manos, me las abrió aún más y las subió y ... en un grueso, viril, degenerado y morboso gemido explotó en mi interior ¡¡¡AAAAHHHHHH!!! ¡¡¡OOHHHHHFFF!!! ... cuando me los tiró todos para adentro, sentí un ardor en mi vagina que me hizo gemir junto con él ¡¡¡AAAAAHHHH!!! ... y también pude oír de más lejos el gemido de mi madre al otro lado de la puerta ¡¡¡AAAAAAAHHHH!!! Ella también “se fue” en ese momento. Luego, ella sonrió y se retiró. Yo estaba impresentable, ya sin maquillaje, con mi pelo desgreñado y con mis ojitos sollozando tímidamente de dolor, humillación y verguenza. Luego, mi padre, muy descargado, desvergonzado y sin ningún remordimiento, me dijo ... –Déjate de llorar ... ya no eres una niña. Luego, se vistió y también se retiró y yo quedé sola sobre mi cama, con mis piernas abiertas aún, sintiendo lo que me dejaron dentro ... y en ese momento, solo tenía una polla en mi cabeza (jajajaja). Era obvio. Bueno, el tiempo pasó después de esa tarde y ... “que pase lo que tenga que pasar” dijo mi padre antes de follarme ... y lo que “tuvo que pasar” fue que algo nuevo comenzó a crecer en mi interior ... sí, así se dieron las cosas, mi padre y yo tenemos una hermosa niña que ya tiene 2 años, y mi madre está muy feliz con su nieta. Ahora, ...