El tio abuelo - Relatos Eróticos

El tio abuelo

Hola, es la primera vez que escribo aquí. Espero que les pueda gustar mi historia. Estaba yo con 9 años cuando sucedió. Llegó a vivir en el mismo fraccionamiento el tio de mi papá al que no conocía antes. Tenía unos 55 años cuando lo conocí, lo recuerdo porque celebró su cumpleaños y nos invitó a su casa a cenar a mi familia. El vivía con su esposa. Esa noche que cenamos en su casa pude conocer la mirada con lasciva de un hombre, no dejaba de mirarme toda la noche, al principio no entendía, pero ya después lo comprendí todo. En ocasiones cuando pasaba por mi lado rozaba su mano o su brazo por alguna parte de mi cuerpo, incluso en un momento nos sentamos juntos en el sillón y sentí el roce de su pierna. Bueno sólo recuerdo esas escenas de esa noche. Después sólo eran encuentros fugaces porque vivíamos en el mismo fraccionamiento, donde yo le sonreía y le saludaba como cualquier vecino más. Un día que fui a un súper pequeño muy cerca de mi casa, por palomitas y refrescos porque en la tarde vendrían mis amigos de la escuela a una tarde de películas, me lo encontré comprando y cuando coincidimos en la caja para pagar me platicó algunas cosas. El compró muchas cosas así que le ayudé con un poco a llevarlos a su casa, me dijo que estaba solo porque su esposa se había ido al hospital. Me invitó a pasar y que me invitaba un pedazo de postre que le había quedado del día anterior, así que acepté porque adoro los postres. Platicamos algunas cosas y ya casi cuando me iba para mi casa, ...

... se acercó a la puerta y me dijo que se sentía solo que le gustaba mi compañía y que si le ayudaba a preparar un poco de refresco para tomarlo con hielo, yo acepté y fuimos a la cocina. Pasaron algunos minutos más y cuando le dije que ya me tenía que ir, nuevamente se acercó a la puerta que daba a la calle y me detuvo, no dejó que abriera la puerta y con una sonrisa muy linda me dijo que yo era muy bonita y que estaba muy grande para mi edad, me dijo tantas cosas de esas que yo me sorprendí. Le dije que gracias pero que ya me tenía que ir. Y fue ahí cuando empezó todo... Se acercó a mi y con su brazo impidió que yo avanzara, me empujo hacia la cocina y me pegó hacia la pared, él estaba más grande por supuesto y tenía más fuerza, puso sus brazos apoyados a la pared y yo quedé en medio, sentía su respiración nerviosas y desesperada, mientras pegaba su pelvis a mi cuerpo, sentía su fuerza y su aliento, pude sentir el olor que lo caracterizaba mientras me decía que yo era su sueño desde que me conoció, que por fin me tenía en sus brazos y que me haría suya en ese momento. Yo no entendía muchas cosas porque nunca mehabía pasado nada similar. Hasta que me pegó sus labios a los míos, entonces entendí lo que muchas veces veía en las películas, que ahora yo estaba siendo protagonista de una apasionada escena de amor (eso creí jajaja), Me gustó al principio y me dejé besar y disfrutar de ese beso que me supo tan rico, sus besos me abarcaba toda, mi boca, mi lengua, mi cara, mi cuello, ...