José y Manuel
Fecha: 07/07/2018,
Categorías:
Gays
Voyerismo
Autor: johansarkisian, Fuente: CuentoRelatos
... medio de la bulla, me encuentro con Diego que tenía una copa vacía en la mano. Estaba algo tomado, pero aún caminaba derecho y tenía la lucidez mental como para darse cuenta de mi gesto de disgusto. -Hola Johan, ¡llegaste! -Retiro lo dicho, no tenía lucidez, su voz vibraba aunque intentara no hacerlo- -Hola. Vine con un amigo, se llama Manuel. Manuel se presenta y le da la mano. Diego lo mira de pies a cabeza y asiente con la cabeza. Me estaba enojando su actitud. -Diego, ¿Estás bien? -Le pregunto- -¡¡José!! -Me interrumpe, odio eso- ¡¡Ven que tienes que conocer a mi novio!! Lo dijo fuerte y claro, creo que algunos escucharon. Sentí las miradas fijas directo hacia mí, tanto que hubiera deseado desaparecer en ese segundo. En vista que nadie llegó, volvió a gritar, esta vez sólo el nombre y no lo demás. Supongo que se dio cuenta de su metida de pata, o tal vez me vio diciéndole que se calle con la mirada. Y llegó el bendito José. Era más alto que Diego, de unos 24 años, tenía una barba muy desarrollada, y también estaba algo tomado. -Mira primo, te presento a Johan, ¿lindo no? -Rico diría yo -y se rieron de su ocurrencia-, hola nene, me llamo José, mucho gusto. Lo dejé con la mano en el aire. Francamente estaba molesto. -Lindo y malhumorado diría yo -Siguió diciendo José-, y esta ricura, ¿Quién es? Ahora preguntaba por Manuel, quien hasta entonces, estaba callado observando todo a su alrededor, como siempre lo hace. -Me llamo Manuel -respondió emocionado-, mucho gusto, tengo ...
... 18 años, nací en Gales pero vivo en Lima desde los 5 años porque mi papá tiene una empresa de... -Jajaja, ¡hablas mucho nene! -Interrumpió José- ¿Estás seguro que eres mayor de edad? -Sí, sí lo es -me adelanté yo-, pero cuidadito con lo que le des de beber. Los estoy vigilando. Y me separé del grupo, que seguía conversando- para ir al baño. En realidad, sólo era una excusa para separarme de ese patán y mi novio, el que me dijo que no bebía. Me lavé la cara, mire mi celular un par de minutos y salí del baño. Afuera, un arrepentido pero alegre Diego me esperaba para darme explicaciones. -¿Explicarme qué? -Le dije- -Explicarte que no bebo normalmente, porque se me sube muy rápido y termino cometiendo muchos errores. ¿Me perdonas? -Lo voy a pensar... -Dije con sarcasmo- Me empuja hacia la puerta del baño y entramos los dos en un instante. Adentro, me besa como solo él sabe hacerlo. -¿Ya me perdonas? -Me pregunta riéndose como un niño. -Claro que te perdono, tontito. Y ahora lo beso yo. Y por un momento olvidé que Diego estaba ebrio, pero lo recordé cuando sus manos me cogían muy fuerte las nalgas, como si quisiera follarme ahí mismo. -Hey, ¿Qué haces? Suelta, no quiero, hoy no. -Sólo un ratito, que nadie nos está viendo... Ya pues... -No, y no insistas. ¿Para eso viniste? Eres increíble. Realmente increíble. Y salí del baño. En mi indignación sólo pensé en irme a mi casa, pero recordé que no estaba solo. Manuel había venido conmigo, y tenía que llevarlo de vuelta. Pero, ¿Dónde ...