La ventana indiscreta
Fecha: 01/10/2017,
Categorías:
Hetero
Autor: waldo1992, Fuente: RelatosEróticos
... a lo más hondo de su ser. Agarrándose a la parte superior de la silla siguió follándome hasta que el grito ensordecedor inundó toda la habitación y de nuevo sus tetas se encargaron de dejarme sin respiración durante todo el rato que duró el orgasmo que, como os imaginaréis, me resultó eterno. Sin dejar de moverse y bajando el ritmo siguió penetrándome hasta que dejó caer todo su peso sobre mi. Yo seguía de lo más cachondo pero ella no parecía dispuesta a darme mi recompensa. De pronto se levantó y se fue hacia la escalera, dándome la espalda. El desprecio era total. Luego supe que era verdadera vergüenza por haber mostrado su orgasmo a un desconocido. Cogió la cerveza que aún se mantenía bien fresquita y le dio un buen trago. Se sentó en la escalera con las piernas bien abiertas y gozando del espectáculo. Tan sólo con la visión que yo tenía delante creo que hubiera sido capaz de tener un orgasmo pero sin poder tocarme eso era imposible. Finalmente dejó la cerveza y se acercó a mi… parece que al final recibiría mi recompensa. -------------------- Estaba en el comedor, alterado. Pensaba qué era lo que tenía que hacer. La situación había llegado a un punto donde sería complicado volver atrás, para bien o para mal. Era ya la tercera cerveza que me bebía. La chica tenía la nevera bien provista e intentaba ingerir alcohol para intentar llegar una conclusión coherente. En el fondo, esto había sido culpa suya. Me había provocado en la distancia, luego me había invitado a su casa y me ...
... había forzado para ella tener un orgasmo. Luego, cuando parecía que íbamos a disfrutar juntos me había soltado y me había dicho que me largara, que tenía mucho trabajo y que por su parte eso era todo. Me fui a la habitación y seguía tumbada en el suelo, con las manos atadas a la espalda, desnuda. Reconozco que la excitación me había hecho perder la cabeza, yo no soy así, pero cuando me soltó y recuperé la movilidad de mis extremidades, y ante el desprecio y la negativa a tener sexo conmigo no pude contenerme. Se defendió cuando me abalancé sobre ella. Forcejeamos, nos empujamos y ella cayó de espaldas golpeándose contra la pared. Al instante perdió el conocimiento, aunque no del todo. Sin pensármelo dos veces la até para evitar que volviera a atacarme y me fui al comedor a pensar. Y ahora, sin saber qué hacer aquí estaba, pensando en cómo resolver la situación, cachondo a más no poder y con esa chica medio desmayada en su habitación. -Hummm…. Uffffff… auuuuuuu….. Empecé a escuchar lamentos que provenían del cuarto de al lado. Se estaba despertando. Bueno, creo que había llegado el momento de la venganza. Tuve la opción de irme mientras estaba traspuesta pero ahora ya era demasiado tarde. Podía denunciarme y tenía que asegurarme que no lo iba a hacer. Entre en el cuarto y allí estaba, tumbada en el suelo intentando soltar sus muñecas atadas con sus propios pantis. Miraba por encima del hombro qué era lo que le impedía desatarse cuando me vio entrar. Sus ojos llenos de odio me ...