1. La reeducación de Areana (10)


    Fecha: 30/07/2018, Categorías: Dominación Lesbianas Autor: señoreduardo, Fuente: CuentoRelatos

    ... manos a la espalda para que no se masturbe. -Sos tremenda, putona, pero está perfecto cómo tratás a la nena. -Ya le dije que es una puta pero que entre vos y yo vamos a hacerla más puta todavía… -Y no te equivocaste. Quiero muy putas a esa nena y a su mamita. Y ahora decime, ¿volviste a ver a la hembra de la librería? -No, pero… -Vela mañana y hablale de Areanita, a ver qué onda. -¿Se la vas a prestar, entonces? –preguntó Elena relamiéndose. -¿No dijimos que hay que hacerla muy puta? Elena rió: -¡Claro!... Perfecto, Amalia. Mañana me doy una vueltita por la librería. ¿Me autorizás a avanzar? -Te autorizo. -Vale, mañana te cuento. -Hasta mañana, zorra. Qué descanses. No bien cortó la comunicación Elena fue al cuarto de servicio y al entrar vio que Areana se movía de un lado al otro en la cama, evidentemente perturbada por ese objeto que tenía metido en el culito. -¿Qué pasa, pendeja? ¿No podés dormir? –preguntó con crueldad mientras se sentaba en el borde del lecho. -Por favor, señora Elena, estoy… estoy muy excitada… Quíteme esa cosa o… déjeme que me masturbe… O mejor cójame… Sí, cójame… -Ni una cosa ni la otra, perrita puta, y como sigas pidiendo te voy a dar una buena paliza por insolente. -dijo Elena en tanto Areana comenzaba a sollozar, víctima de la tensión física y sicológica que la martirizaba. Elena se aseguró que el plug anal estuviera firme y bien introducido en el ano y luego abandonó la habitación disfrutando sádicamente del sufrimiento de la niña. …………. Al día ...
    ... siguiente fue a ver a la sumisita a las 10 de la mañana y la encontró durmiendo, vencida finalmente por el agotamiento. Verificó que el plug anal estaba en su sitio y sin despertarla se dirigió a la librería ganada por la ansiedad. La mujer la reconoció de inmediato y luego de saludarla dijo: insinuante: -Sola esta vez… Elena se acercó sonriendo al mostrador: -¿Se refiere a la nena? -Sí… a esa chiquita con la que vino a plastificar una… una credencial… -Areana se llama… -Mmhhh, nombre raro y muy lindo… -Muy lindo como ella, ¿cierto? La mujer advirtió que el diálogo cobrara un cariz muy sugerente y aprovechó el pie que le había dado esa desconocida: -Sí, un nombre muy lindo para una jovencita muy linda… -dijo y movió su lengua entre los labios, muy lentamente mientras miraba a Elena con fijeza. Autorizada como estaba por Amalia para avanzar en la entrega de Areana decidió ir a fondo: -Le gusta mucho la nena… -arriesgó Elena y enseguida preguntó: -¿Cuál es su nombre? -Marta… y sí, me gusta la nena… ¿Está mal? -Al contrario… -respondió Elena. -Ah, qué bien… -Voy a ser directa, Marta… La nena está a su disposición… La mujer abrió desmesuradamente los ojos e hizo una pausa para reponerse: -¿A mi disposición?... ¿Qué quiere decir eso?... –preguntó sin poder creer lo que tal afirmación significaba. -Eso quiere decir que puede venir a casa a buscarla y echarse en la cama con la nena. La mujer tragó saliva, asombrada y al límite de su capacidad de comprensión. Pensó un momento y dijo: ...
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