1. El viejo cerdo y el niño machito.


    Fecha: 06/08/2018, Categorías: Gays Autor: xxpervertidorxx, Fuente: SexoSinTabues

    ... ¿tienes hora?. - Si, las 6 y media. - Gracias, oye, juegas muy bien al futbol. Has metido un par de golazos. Le espetaba Juan, mientras lo miraba de arriba abajo, observaba la cara sin bello sudada, los labios carnosos, una camiseta ajustada que se le estaba quedando pequeña, unos pantalones cortos aun mas pequeños que marcaban un pequeño bulto y un culo bastante respingón. - Gracias.- Dijo el niño sonrojándose y con una sonrisa pícara sabiéndose bueno en el futbol. - Te gustaría ganar estos 50 euros.- Soltó Juan sonriéndole y enseñándole los billetes. - Pues claro.- Dijo Cristian rápidamente. - Te he oído que tu novia aun no te la comido, me gustaría chupártela.- A Juan no le importaba si el niño se ofendía, si se lo contaba a sus padres o si podía formar un escándalo, le daba igual todo, tenía toda la sangre en su polla que palpitaba solo con tener ese cuerpo sudado tan cerca. El niño se quedó totalmente helado, nunca jamás habría pensado que un viejo le iba a pedir tan seriamente chuparle la poya, jamás había pensado en tener sexo con otro tío, sólo se había pajeado delante de algún amigo viendo algo de porno en revistas, pero sin pensar en tener nada de sexo. Se quedó paralizado sin saber responderle adecuadamente, el sabia como meterse con los maricones de su colegio, pero un viejo maricón?, no sabía ni que existían. Por otra parte 50 euros para él era mucho dinero, en una casa en donde no había ni para el bocadillo que todos sus amigos comían por las tardes y ni pensar ...
    ... en chucherías. - No soy un maricón.- Dijo tímidamente pero con enfado, en voz baja, solo mantener esa conversación le estaba dando vergüenza, si alguien les oyeran o le relacionaran con un marica, sería algo terrible para él. El chico comenzó a andar alejándose cuando juan rápidamente se levantó y le pidió perdón. - Perdona no te quería enfadar, toma 10 euros por las molestias, aunque piénsatelo, 50 euros por una buena mamada, tu solo tienes que cerrar los ojos y pensar en tu novia. El niño sin decir nada cogió los 10 euros, su necesidad le hacía cogerlos sin rechistar, y se fue a casa, muy temeroso de que alguien podía haberlo visto con ese viejo asqueroso. Pasaron un par de días sin volver a ver a los niños jugar en el parque, hasta una tarde volvieron a jugar al futbol. Allí estaba Juan sentado mirando como jugaba Cristian, cada movimiento, su bulto en sus pequeños pantalones, sus piernas sin bello pero atléticas, como se limpiaba el sudor y no hacía más que pensar en cómo le enseñaría a ser una buena zorra. Juan se había dado cuenta que el niño no estaba tan hablador, ni tan chulo con sus amigos. Cristian estaba serio y nervioso, sabía que era observado por ese viejo pervertido, que quería comerle la poya. Los chicos terminaron de jugar y cada cual tomó su camino. Cristian se hacia el remolón, atándose los cordones de las zapatillas, mirando nervioso para todos sitios¸ se puso a andar hacia Juan, seguía mirando en todas las direcciones, se quería asegurar que no le veía ...
«1234...8»