La sobrina de mi esposo (III) - Relatos Eróticos

La sobrina de mi esposo (III)

... el día viernes, me arregle me bañe súper bien afeite mi cuca dejando una línea muy fina de bello, me perfume como nunca e hidrate toda la piel de mi cuerpo, sin embargo no me puse la ropa que me compro me puse un conjunto diferente y un pantalón y una blusa, quería sacarle la piedra cuando salí me miro pero no dijo absolutamente nada salimos de la casa cada uno para su trabajo y al despedirnos me beso diciéndome – a las 300 paso por ti espero que estés listas, se nota que me conocía sabia que seguramente yo saldría de la oficina a las 12 y llegaría al apto y me arreglaría para no dejarlo verme o que me voy a poner. Toda la mañana se me hizo eterna no me rindió el trabajo, tuve que distraerme con muchas cosas pues la ansiedad no me dejaba concentrar, cuando dieron las 12 parecía un loba en celo no me despedí de nadie solo tome un taxi y llegue a mi casa, me mire al espejo y revise que quería que pasara esa noche, cual seria su sorpresa o hasta donde permitiría llegar, sin embargo el reloj de la pare me decía tu tiempo es corto o te arreglas o te quedas pensando pendejadas; Me entre nuevamente al baño revise todo mi cuerpo que estuviera impecable, me bañe hasta en leche cual diosa, cuando salí me miraba todo el tiempo en el espejo y mi cuca estaba muy húmeda, me puse la lencería que me regalo era divina no había duda y escogí unas medias hasta el muslo negras con diseño y las porta liga las sostenían ,escogí un vestido de coctel negro mate con transparencias corto falda en ...

... velos, en la parte de adelante con un cinturón de zarosqui de ajustar en el cuello transparente hasta el busto hombros destapados y unos zapatos de tacón alto con un decorado de zarosqui y la punta destapada, me sentía muy sensual muy hermosa alisé mi peinado, me maquille con los labios un rojo pasión fuerte sombras en los ojos aliste un abrigo color blanco crema para cubrime en la noche, cuando termine eran las 315 y mi esposo ya estaba en la portería llamando para decirme que me esperaba abajo. Cuando salí del apto cruce con un par de vecinos que no me quitaron el ojo de encima, me dio mucha risa la cara de mi esposo que no daba crédito al verme, hasta el portero no disimulo mi esposo se bajo del carro y me abrió la puerta, nos dimos un beso a arranco, cuando llegamos al parque se detuvo y volvió a darme un beso pero esta vez con lengua muy apasionadamente mis piernas se veían hermosas con la abertura al frente, – uy hermosa te vez muy divina el vestido las medias tu rostros, toda te vez espectacular, hasta ahí note que también se había cambiado y tenia un traje azul oscuro brillante de diseño nerú, muy lindo el sabe que ese vestido también me gusta muchísimo, – bueno ahora si me puedes decir a donde me vas a llevar?, o que me vas a hacer? Jajaja, me reí mientras lo decía, – es una sorpresa pero te va a gustar amor deja la ansiedad, volvió a prender el carro y nos fuimos a un restaurante llamado el chalet suizo en el park way acorde al momento, con la mesa decorada y música de ...