Mi madre mi tia y mi tio
Fecha: 09/10/2017,
Categorías:
Incesto
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
Mi nombre es Carlos, tengo 22 años y soy hijo único de un padre laburante y una madre ama de casa. Ellos tienen 45 y 42 años respectivamente. Papá trabaja en una empresa del ramo metalúrgico, trabajo que lo obliga a viajar por largos períodos de tiempo para supervisar la instalación de las máquinas que su empresa fabrica. Desde hacía ya dos años, gracias al trabajo que conseguí en un banco, me independicé y me fui a vivir solo, esto me permite practicar mi deporte favorito: coger a cuanta mina se me cruza y me de pelota. No le hago asco a nada, mi lema es "un vaso de agua y un polvo no se le niega a nadie". Así pasaron por mi departamento altas, bajas, rubias, morochas, jóvenes, viejas, gordas, flacas, casadas, solteras y cuanto espécimen se les ocurra. Llegué a cojerme una chica de 19 años y una viejita calentona de 60 años, de todas saco alguna enseñanza que luego aplico con la siguiente. Lo que les quiero contar es algo reciente, hace dos meses que dio principio esto. Desde hacía un tiempo notaba que mi madre estaba algo rara, los momentos de euforia eran seguidos de momentos de depresión, yo para mis adentros pensaba que estaba mal cojida, pero lo que me llamaba la atención era que en general los momentos tristes coincidían con la estadía de papá en casa. Esto me hizo pensar en algún amante que la atendía cuando estaba ausente papá y la desatendía cuando este llegaba de alguno de sus viajes. Me propuse averiguar que era lo que le pasaba realmente y para eso aproveché ...
... una tarde que salí anticipadamente del trabajo y me fui directo a su casa para charlar con ella. Cuando llegué vi el auto del tío Alfredo en la puerta, esto me dio fastidio ya que en presencia de él no podría hablar. De cualquier manera buscaría el momento y la forma. Como aún conservaba las llaves de lo que había sido mi casa también, entré sin llamar, para que lo hice, el cuadro que encontré en el comedor me dejó mudo. Mamá estaba totalmente en bolas, tío Alfredo la estaba cojiendo por el culo y completando el cuadro la tía Sandra, esposa de Alfredo y hermana menor de papá también desnuda, tirada en el sillón con las piernas bien abiertas y con mamá prendida en su concha. El cuadro era de película porno. En un primer momento no supe que decir, luego me dio mucha bronca el que mamá le metiera los cuernos a papá de esa forma y con quien lo estaba haciendo. Le grité a ella y a tía Sandra que eran dos putas y que lo que estaban haciendo era una guachada a papá. Lo del tío de alguna manera lo entendía ya que él solo cojía a dos mujeres. Si ya se me salió el machismo de adentro, pero así somos los hombres. La situación que siguió a mi entrada era de una película del neorrealismo italiano, tío seguía clavando a mamá por el culo y tratando de explicar lo inexplicable, tía dura y sin articular palabra, creo que mi aparición le había cortado el orgasmo y mamá clavada por tío, con la cabeza girada hacia mi y un hilo de saliva y jugos de tía colgando de sus labios. Se largó a llorar ...