Historias de oficina -18-
Fecha: 14/10/2018,
Categorías:
Hetero
Autor: Danuss, Fuente: CuentoRelatos
... lugar? Sus labios dibujaron una pequeña sonrisa mientras se hacía a un lado dejándome que me acomode a su lado – no es nuestro enemigo, lo prometo – fue lo único que quiso decirme, se acomodó sobre mi cuerpo antes de quedar felizmente dormida. A una semana de las declaraciones del canciller alemán todo seguía complicándose, cientos de arrestos se había llevado a cabo por todo el país, cualquiera sospechoso de ocultarle información al estado era encarcelado, no solo civiles sino militares, miembros del gobierno y servicios de inteligencia. Todos estaban en la mira, las investigaciones lograron llegar hasta las bases controladas por aigner y la cantidad de irregularidades encontradas puso en alerta al país. Las fronteras se cerraron y entro en vigencia un estado policial. En el país, las industrias vask estaban a punto de formar parte del grupo económico hudson y me renuncia estaba todavía más cerca, un peso estaba a punto de salir de mis hombros. Mi día empezó como de costumbre revisando mis correos electrónicos y mirando las noticias a nivel mundial. El hecho que me esté por retirarme no significaba que perdiera mi toque de buscar conflictos que resultaran en gordos contratos con uno de los bandos. Mariza se acercó trayendo consigo un humeante café recién preparado. —¿no se supone que para esto tenemos empleados en la casa? – comente divertido. —no, la única que puede encargarse de que estés bien atendido soy yo, nadie más. Comento simulando enojarse, sus brazos me ...
... abrazaron por atrás permaneciendo así por unos instantes que recargaron a un más mis energías y mis deseos de por fin estar en paz, hasta que algo tan cotidiano como esta rutina se encargó de destruirlo. —señor vask el señor michael sellers se encuentra en la puerta norte pidiendo acceso ¿ordenes? – se anunció a través del handie que se encontraba sobre la mesa. —que pase – respondí simplemente. Mariza me abrazo con más fuerza apoyando su mentón sobre mi hombro, como si quisiera demostrar con eso que mis celos eran solo eso celos y que su corazón estaba conmigo. La puerta se abrió y ese despreciable sujeto entro, con una estúpida sonrisa observo la tierna escena mostrándose totalmente inmune. —buen día tortolitos, cuanto amor. Víctor ¿podemos hablar en privado? —puedes hablar acá, no hace falta que deje enfriar mi café. —prefiero hablar en privado si no te importa. —¡decime lo que viniste a decir o ándate ya de mi casa! —¡víctor! – me amonesto mariza – los dejo hablar tranquilos, voy a ver qué hace natalia – dijo dirigiéndose hacia la cocina – y… michael tarde o temprano me voy a enterar que hablaron —que sea tarde entonces – respondió con una estúpida sonrisa. Mi bella mariza solo se alejó sonriendo, pero antes no olvido tirarme un beso. —adiós, te amo. —adiós, yo más – respondió guiñándome un ojo. La mirada de ese despreciable tipo no se despegaba de mí, tomo asiento a mi lado sin decir absolutamente ninguna palabra solo sacando un smartphone de su bolsillo y haciendo unos toques ...