Mis memorias - Tercer capítulo
Fecha: 11/10/2017,
Categorías:
Grandes Relatos,
Autor: Dinamujermadura, Fuente: CuentoRelatos
... acerque y la salude por el costado de la puerta. — ¿Dianita mi vida como estas? — Bien doña Elvira. — hay no me digas así que suena muy serio. Dime como quieras. Pero no doña. — ¿Descansaste? Le pregunte — Ayer quede preocupada porque estaba medio mareada. —Hay tan divina no me paso nada estoy bien solo un poco con resaca pero no más. Y tu como amaneciste. —Pensando en ti y en ese beso que nos dimos. —Hay si mi vida sabes te invito hoy a almorzar en el hotel quieres venir. —Si claro yo acepto tu invitación. —Entonces nos vemos allá chao mi vida y el beso también me encanto. Y arranco siguiendo su camino, yo también seguí a mi casa. Llego el medio día y me puse mi mejor pinta, seguía con ansiedad, mi tía Esther ya se habían ido con Federico y su esposo y las cuatro niñas para Cafan. Vi que Sara y Amanda se estaban poniendo bien bonitas. Yo me fui primero pues estaba invitada a almorzar. Cuando llegue al hotel, le pregunte a una de las mucamas si doña Elvira estaba y me dijo que no estaba pero que no demoraba. Me toco esperarla en la recesión fumándome un cigarrillo. Y tomándome un refresco. Al fin la vi llegar entro su carro y llamo a uno de los meseros para bajar unas cosas del mismo. Se dirigió a su oficina y yo por un costado la seguí, llegue y me estaba esperando. Cerró la puerta y se me acerco a besarme y yo acepte sus labios besándola apasionadamente y así duramos como 20 segundos, nos separamos y me sonrió nerviosamente. — Como las cosas se fueron dando yo esta mañana ...
... pensé que había tenido una torpeza contigo anoche, pero cuando me dijiste esta mañana eso, me tome confianza y quise mirar a ver que pasa. — Hay yo también, a mi me gustaría mucho poder estar contigo, después que te fuiste no hice si no penar en ti. Nos sentamos en los sofás de la oficina y me contó que ella me hacía cuarto para que yo pudiera estar con los caballeros con los que has estado. — Donde mi esposo se dé cuenta de lo que tú haces acá no te vuelven a dejar entrar, es muy estricto con eso pero yo te he dejado por que tú me gustas mi vida. Varias veces te he visto entrar a los cuartos y me imagino que algún día entraría contigo a uno. — creo que ese día se te va a dar, porque yo también me imagine eso anoche, ardo en deseo de estar contigo. Volvimos a besarnos, sus labios carnosos me sumergían cada vez más en querer tener el gusto de acostarme con ella. — espérame un momento hago unas cositas y almorzamos ok. — Ok mi amor acá te espero. Se despidió dándome otro beso, me encanto este momento me recordó de la primera vez cuando perdí mi virginidad estaba sintiendo las misma sensaciones, espere como unos 20 minutos. Y luego paso a la ofi otra vez y saco unas cuentas para hacer después unas llamadas y nos fuimos para el comedor. Me sugirió pedir la especialidad de la casa que es un bocachico. Que estaba delicioso, no me lo pude comer todo porque el pescado es bastante grande, terminamos el almuerzo y volvimos a la oficina. Ella siempre por lo general se acuesta a dormir la ...