1. La amorosa hija (Parte 9)


    Fecha: 10/01/2019, Categorías: Incesto Autor: Thomas, Fuente: CuentoRelatos

    ... comenzaba a darle su recompensa. “¿Sabes novio?”, comenzó con su característico tono sensual, “si me coges ahorita me destrozarías el culo… sé que te mueres por metérmela por ahí”, al tiempo que continuaba mamando con habitual destreza y placer el venoso tronco, “además no sé si mi marido tenga ganas de coger. Ya nos toca, ¡Imagínate que me encuentre el culo lleno de tu leche!” Bajó un poco más su pantalón, hasta dejarlo a medio muslo y comenzó a acariciar los gigantescos y pesados testículos. Luego, subió sus manos al estómago de su novio y comenzó a acariciarlo con sensuales movimientos circulares. Tomás estaba con la mirada perdida. Solo veía de reojo la rubia cabellera de Anne moverse mientras experimentaba el ardiente y ansiado placer del sexo oral que ella le hacía. Sentía como si su verga estuviese anestesiada, dándole una riquísima sensación. “¡Ooohhh… aaaahhhh… ahhh! ¡Ay, hija… novia!”, balbuceó Tomás al sentir el delicioso cosquilleo y comenzó a gemir fuertemente… “¡Tus nalgas... me encanta tu culo… me trastorna!”, gritaba Tomás, mientras poderosos chorros de más de una semana de semen brotaban como pocas ocasiones, inundando la boca de Anne, mientras ella se engolosinaba devorando la abundante y caliente carga, vertiéndola también sobre su cara y senos. Tomás al fin se relajó. Miró hacia abajo y contempló la bella cara de Anne embarrada con su semen, que sonriente también lo miraba. Su obra de arte, pensó. Se veía hermosa. Tomó de la mesa lateral una cámara ...
    ... digital y le dijo “Sonríe”, al tiempo que tomó una foto con el consentimiento de su hija. "¡Novio!", exclamó Anne, fingiendo desaprobación. “Métete la verga en la boca y sonríeme con los ojos, novia”, ordenó Tomás, y tomó otra foto. “Deberíamos tomar más fotos de estos momentos, novio. Que sea nuestro tesorito”, sugirió Anne. Anne se puso de pie y se dirigió al baño a limpiarse. Tomás tomo otra foto de su hija desnuda. “Me gusta esto de las fotos”, dijo Tomás. “A ver”, dijo Tomás. “Que nos tome una foto sola esta cosa. ¿Sabes cómo hacerle?”. Anne se regresó y tomó la cámara en sus manos y activó el temporizador mientras papi la esperaba a unos metros. La puso sobre unos libros, encuadró bien, lo activó y corrió a él, abrazándolo por el cuello, mirando a la cámara. Cuando tomó la foto, revisó como había salido, e hizo señal de aprobación con sus dedos, activó de nuevo el temporizador y corrió de nuevo hacia su amante, se arrodilló a su lado, tomó su semi-erecto pene y se lo metió en la boca, sonriendo ambos a la cámara. Se tomaron otra más, ella parada frente a Tomás, y él con ambas manos en sus senos. El semen de Tomás seguía en su cara. “Déjame retratar tu vergota novio. Esa foto es para mí”, dijo Anne, tomando la cámara y fotografiando el pene de su padre, lo suficientemente cerca y con la mejor resolución posible. “Para tal caso”, dijo Tomás, “déjame tomarle fotos a tu hermoso trasero para mí nomás”. Fueron a la recámara, Anne su puso en cuatro y Tomás tomó fotos de su hermoso ...